La proposición de ley del PSOE para regular e implantar de manera universal y progresiva con financiación pública el primer ciclo de educación universal, de 0 a 3 años, en la Comunidad Autónoma, no ha salido adelante tras haber tenido en contra a los grupos parlamentarios del PP y Ciudadanos y al diputado de Vox Pascual Salvador. A favor sí votaron el grupo socialista y Podemos, mientras que los tres diputados suspendidos de Vox se abstuvieron.

La proposición de ley contemplaba promover un incremento de plazas para niños de 0 a 3 años hasta llegar al 40% de escolarización infantil. Para ello, son necesarias 9.000 más -en la actualidad la Región cuenta con 8.600-. El diputado socialista Antonio Espín recordó que Murcia es una de las regiones con la tasa más baja, del 19%, mientras que la media española está en el 34,8%. Asimismo, subrayó que la Región solo tiene catorce escuelas públicas para el millón y medio de murcianos, «las mismas que puso en marcha el PSOE hace más de 25 años».

Para Espín, la ampliación de plazas para niños de 0 a 3 años es necesaria para paliar el problema de conciliación de las familias murcianas, agravado aún más por la «precariedad laboral» que sufren. «Tenemos los sueldos más bajos de España», añadió.

La proposición fue rechazada por el PP y Cs al considerar éstos que el acuerdo de Gobierno de PSOE y Unidas Podemos a nivel nacional recoge en uno de sus puntos la universalización del acceso a la Educación Infantil en el que se especifica que se elaborará, «conjuntamente con las comunidades autónomas y en el seno de la Conferencia Sectorial, un plan de extensión de la Educación Infantil, con una red pública e integrada de recursos que garantice una oferta suficiente de plazas públicas para todos los niños y niñas menores de 3 años».

En este sentido, el diputado popular Víctor Martínez-Carrasco afirmó que «los socialistas murcianos van por libre y pretenden que la Región pague con fondos propios lo que su partido a nivel nacional dice que debe financiarse con recursos del Estado».

En la misma línea, desde Cs, Juan José Molina avisó al PSOE de que está «legislando en contra de sus socios de Gobierno», incidiendo en que no se quiere tener 17 regulaciones distintas. Además, les achacó que propongan una ley «que no es gratuita».

La portavoz de Podemos, María Marín, sí apoyó la proposición, aunque criticó a los socialistas falta de «atrevimiento», ya que «de aprobarse tal y como está redactada, supondría el avance de un modelo de educación concertada». Además, afeó a Espín que obviase los acuerdos del Gobierno de Coalición de España.

Mabel Campuzano, de Vox, se mostró a favor de que se debata el texto para poner sobre la mesa elcheque escolar «para que los padres puedan elegir».