Una experta de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) ha propuesto este lunes cambiar el modelo productivo murciano porque el proyecto de ley de Cambio Climático o el pacto verde europeo van a «tocar de lleno» a sus principales sectores: agroalimentario, comercio, hostelería y pesca.

En su comparecencia en la Comisión de Reactivación Socioeconómica posCovid-19 de la Asamblea Regional, la directora de la cátedra Agritech de esa universidad, María Dolores Gómez López, dijo que es «una necesidad» y que las políticas medioambientales «no significan ir en contra de la economía».

María Dolores Gómez advirtió de que España podría perder cerca de 200.000 millones de euros en los próximos 10 años si no adopta estas políticas. Recordó que los principales sectores a los que afectará son los mayores productores, pues la agricultura y la pesca que representa el 6 % del PIB regional, la industria agroalimentaria cerca del 8% y la hostelería y el comercio, el 24%, por lo que habría que cambiar el sistema productivo.

La profesora titular del departamento de Ingeniería Agronómica alertó de que el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima establece que España debe alcanzar «la neutralidad climática» para 2050, fecha en la que el sistema eléctrico deberá nutrirse al 100% de energías renovables y reducir en un 23% las emisiones de gases de efectos invernadero, por lo que habría que trabajar en esta línea.

Por otra parte, argumentó que la estrategia europea «De la granja a la mesa» para la Política Agraria Común (PAC) en el período 2021-2027 es «ambiciosa» y «difícil» de llevar a cabo y afectará «de lleno» a la Región , pero hay que ponerla en marcha para reducir «la huella medioambiental y climática» del sector agrario.

En especial, se trata de garantizar que la cadena alimentaria tenga un impacto medioambiental «neutro o positivo» y restablecer los recursos de agua salada y dulce, entre otros asuntos.

Los objetivos que afectarán a la Región son reducir el uso de fitosanitarios, abonos y antibióticos en la agricultura y la ganadería, aumentar la extensión de los cultivos ecológicos y las áreas protegidas de la Unión Europea, lo que toca todo el sistema productivo murciano. Comentó que la agricultura murciana tiene «puntos fuertes», entre ellos, «buenos productores», «buena imagen», «alta calidad» y «tecnología agrícola reconocida internacionalmente», pero deberá desarrollar un plan de zonas contaminadas, solucionar los problemas medioambientales para asegurar las ventas y dar «seguridad» a los compradores.