Si España desarrolla todo su potencial de producción de gases renovables, podría llegar a reducir unos 35 millones de toneladas de CO2, es decir, más del 10% de las emisiones de gases de efecto invernadero previstas para el año 2030. Este valor equivale al CO2 que emite todo su parque de turismos en un año o el que absorbió toda la superficie forestal de España en 2017.

Este es uno de los datos que aporta el nuevo estudio de Fundación Naturgy 'Los gases renovables. Un vector energético emergente'. La publicación aborda, desde una perspectiva técnica, económica y ambiental, el desarrollo de los gases renovables en nuestro país.

Sus autores, el doctor ingeniero industrial y profesor emérito de Ingeniería Ambiental de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), Xavier Flotats, y el ingeniero de Caminos de la UPC y experto asesor ambiental, en gestión de residuos y desarrollo sostenible, Álvaro Feliu, consideran que nuestro país tiene un elevado potencial de producción de gases renovables.

En la banda baja equivaldría a la cuarta parte de la demanda actual de gas en España, pero «podría cubrirse hasta un 65% de la demanda actual de gas natural con este tipo de gases, siempre que se impulse su desarrollo de forma decidida y sin mayor demora», explica Flotats.

Los gases renovables contribuyen de forma significativa a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y a la gestión de residuos, y resultan clave en el nuevo paradigma de la economía circular y la descarbonización del sistema energético. En este sentido, pueden contribuir de forma activa a la Estrategia Española de Economía Circular aprobada esta misma semana por el Gobierno.