Agentes de la Guardia Civil han auxiliado en Torre Pacheco a un hombre de 73 años que se encontraba en su domicilio y había perdido el conocimiento, informa este cuerpo.

Las actuaciones se iniciaron durante la noche, cuando efectivos Prevención de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil recibieron el aviso de la exmujer en el que comunicaba que su exmarido llevaba varios días hablando con ella, vía telefónica, afirmándole que no se encontraba bien debido a que padecía mareos y problemas de corazón.

También informó que unas horas antes le había llamado en repetidas ocasiones solicitándole auxilio pronunciando palabras ininteligibles, por lo que la Guardia Civil desplazó una patrulla hasta el domicilio de la desplazó al domicilio del exmarido, en el municipio de Torre Pacheco, para verificar su estado de salud, al no responder a las llamadas.

Ante la posible gravedad de la situación, los guardias civiles saltaron el muro perimetral del inmueble, de más de dos metros de altura, y abrieron la puerta de la urbanización y accedieron a la vivienda, que se encontraba con la puerta abierta.

Una vez en el interior, los guardias civiles observaron al varón que yacía en el suelo, encontrándose respirando de manera agitada, sin poder vocalizar y presentando quemaduras en brazos y tórax debido a que se había desmayado sobre la vitrocerámica de su cocina.

Inmediatamente, la patrulla de la Benemérita solicitó la presencia de una ambulancia para que el varón recibiera asistencia médica urgente, asegurándose, durante el tiempo que tardó en llegar esta, que el varón se mantuviera en la posición de seguridad de primeros auxilios y de forma consciente.

Una vez tranquilizado, el herido informó que mientras se encontraba cocinando empezó a sentirse mal, desvaneciéndose sobre la vitrocerámica, sin recordar nada más.

Finalmente, se personó el equipo médico estabilizando in situ al herido y trasladándolo a un centro hospitalario para seguir recibiendo asistencia sanitaria debido a las graves quemaduras que presentaban.

La colaboración ciudadana y la rapidez en la actuación de la Benemérita han resultado vitales para salvaguardar la vida e integridad del herido, siendo de extrema dificultada para los agentes el sortear el muro debido a su gran altura.