El Gobierno regional vuelve a reclamar un nuevo modelo de financiación autonómica que se base en un reparto acorde con la población «para consagrar principios básicos como la equidad, la justicia y el equilibrio territorial, garantizando de verdad la igualdad de todos los españoles que consagra nuestra Constitución». Así lo destacó este viernes el consejero de Presidencia y Hacienda, Javier Celdrán, durante su comparecencia en la Comisión Especial de Financiación de la Asamblea Regional de Murcia.
En su intervención, el titular de Hacienda subrayó «que la necesidad de reformar el injusto, insolidario e insuficiente sistema de financiación aprobado en 2009 por Rodríguez Zapatero, urgente desde hace muchos años, ahora es simplemente ineludible tras el impacto del coronavirus, porque la desigualdad territorial a la que nos condena es un lastre que sitúa a la Región en una posición de desventaja para salir de la crisis que se nos avecina».
Celdrán recordó que esa reforma estaba lista para ser aprobada con consenso en el año 2018, pero «cuando accedió al Gobierno Pedro Sánchez se puso inexplicablemente el contador a cero y se congeló en el tiempo, consolidando situaciones claramente discriminatorias, como la de la Región de Murcia, a pesar de ser conscientes del perjuicio que se causa a los murcianos, tal y como han reconocido hasta dos miembros del actual Gobierno».
Para acabar con las enormes e injustificadas diferencias entre territorios Celdrán defiende que el nuevo modelo «no sólo tiene que primar el criterio de población y suprimir el 'statu quo' (derechos consolidados por las comunidades) que mantiene la brecha territorial, sino también corregir la insuficiencia financiera e incluir mecanismos de nivelación que garanticen que las comunidades puedan seguir prestando unos servicios públicos de calidad independientemente de los ciclos económicos.
Además, el consejero de Hacienda señaló también la necesidad de que la revisión del actual sistema de financiación se complete con una solución al problema de la deuda generada durante su vigencia. Precisó que «en el año 2008, antes de la entrada en vigor de este modelo, la deuda ascendía a 755 millones de euros, y éramos la segunda comunidad menos endeudada. Hoy, tras 10 años de asfixia de un modelo de financiación que nos maltrata, la deuda alcanza 9.562 millones de euros»
Defendió que «a pesar de la infrafinanciación que ha sufrido la Región en la última década, el Gobierno ha hecho importantes esfuerzos por contener el déficit» y recordó que desde el año 2010 se ha reducido en un 64,5 por ciento «sin afectar a la prestación de los servicios públicos esenciales gracias a las medidas de eficiencia en el gasto». Celdrán finalizó la comparecencia invitando a todos los grupos de la Asamblea «a hacer frente común para exigir un sistema justo de financiación que no discrimine a la Región».
El diputado socialista Alfonso Martínez Baños contestó que su partido apoyará al Gobierno en sus peticiones de reforma del sistema siempre que se haga con «objetividad» y «sin tintes políticos» y tras «auditar el gasto» de ese Ejecutivo.
Fernando Álvarez, de Cs, exigió que la financiación autonómica «deje de estar ligada al peso político o a los votos de apoyo a un Gobierno o moción de censura» y se base en «criterios técnicos de población»
El parlamentario de Vox Francisco José Carrera reprochó al PSOE que desde Moncloa «sangre a los ciudadanos con impuestos», lo que considera desleal para obtener financiación para la Región.
El diputado de Podemos Rafael Esteban preguntó a Celdrán «qué servicios estatales deben dejar de financiarse si está en contra de subir los impuestos a los que más tienen».
