El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, confirmó este domingo que pedirá al Congreso la «última y definitiva» prórroga del estado de alarma de otras dos semanas, hasta el 21 de junio, en la que los presidentes autonómicos serán la máxima autoridad una vez sus territorios estén en la fase 3, a la que previsiblemente entre la Región de Murcia el próximo 8 de junio.

Tras celebrar la reunión de presidentes autonómicos, Sánchez explicó que si el Congreso aprueba la ampliación, a partir del 8 de junio el estado de alarma será «muy distinto» pero «necesario» para culminar el proceso de desescalada en la crisis del coronavirus. En manos del Gobierno lo único que quedará será la regulación de la movilidad, remarcó.

El jefe del Ejecutivo explicó que serán los presidentes autonómicos quienes pilotarán el paso de la fase 3 de la desescalada a la nueva normalidad y quienes tendrán la última palabra sobre la duración de ese periodo.

Los presidentes autonómicos decidirán, por lo tanto, cuándo se levanta el estado de alarma en sus territorios una vez ya hayan superado la fase 2, además del número de días que quieren permanecer en la 3, aunque podrán solicitar recomendaciones al Ministerio de Sanidad. Supone, dijo Sánchez, el paso de la «cogobernanza» a la «gobernanza plena» de las comunidades autónomas, que ostentan la competencias en materia de sanidad.

El presidente de la Región, Fernando López Miras, criticó tras conocer el anuncio que el mismo se haga sin especificar cómo va a ser la colaboración con las Fuerzas Armadas, encargadas del control de movilidad, y si estas van a seguir las indicaciones de las autoridades sanitarias regionales, que serán la autoridad competente al amparo del anuncio de Sánchez.

Estas decisiones se han tomado en virtud del acuerdo entre el Ejecutivo central, el PNV y ERC con el objetivo de aprobar la sexta y última prórroga del estado de alarma, que finalizará, si el Congreso la avala, el día 21 de junio a las doce de la noche. Un acuerdo que fue criticado por el líder regional. López Miras no considera «ético ni legítimo» llegar a un pacto de este tipo «con los que quieren romper España».

«Hoy, gracias a un acuerdo con ERC, nos enteramos de que el Gobierno central ha negociado la prórroga del estado de alarma a cambio de no sabemos qué. Me temo que, como viene siendo habitual, beneficio para la Región de Murcia no habrá ninguno», expresó Miras.

También lamentó que, una semana después de que demandara al Ministerio de Sanidad un protocolo de actuación para la apertura de las escuelas infantiles, siga sin recibirlo. Sánchez respondió, según el presidente regional, que las autoridades sanitarias están ultimando el documento.

Cansado de esperar, advirtió a Sánchez de que «si mañana no hemos recibido ese protocolo sanitario para la apertura de las escuelas infantiles, enviaremos una propuesta desde la Comunidad para que sea validada por parte del Ministerio de Sanidad. Parece extraño que haya recomendaciones para la distancia que debe haber entre mesas en un bar y no para las escuelas infantiles».

En materia económica, reiteró la petición de que se permita el endeudamiento de las comunidades autónomas para hacer frente a los gastos derivados de la lucha contra el coronavirus.

López Miras calificó de «más que necesaria» la prórroga de los ERTE causados por el coronavirus hasta septiembre y se lo trasladó en estos términos a Pedro Sánchez.

Protocolo para turismo

turismoEl líder regional considera que debería celebrarse una reunión entre la ministra de Turismo y los consejeros del ramo en la que se elabore un «protocolo claro» para la llegada de visitantes. «Que los turistas extranjeros sepan a qué atenerse una vez que vayan a realizar sus reservas hoteleras en España», afirmó Miras.

Explicó que este año «en el día de la Comunidad, el 9 de junio, se homenajeará a todos los murcianos por su responsabilidad y su actitud ejemplar» durante el periodo más complicado de la pandemia.

Se congratuló de que la Región lleve 10 jornadas sin fallecidos por el virus, pero hizo una llamada a la responsabilidad ante la llegada del verano y el buen tiempo para evitar un retroceso.