Yolanda Muñoz tomó posesión como presidenta de la Autoridad Portuaria de Cartagena el 17 de diciembre de 2019, la primera vez que una mujer ocupaba ese cargo en la Región de Murcia. Entonces, marcó como su principal reto estratégico la conexión del puerto «por tierra, mar y aire, conectar con el Corredor Mediterráneo, lo que nos va a permitir adaptar el actual modelo productivo a las necesidades y desafíos del futuro, conectando nuestra economía con la del resto de Europa».

¿Cuáles fueron los principales desafíos tras el estallido de la pandemia?

Sin lugar a dudas, la gestión de las personas y el reto de atender nuestro servicio esencial del transporte de mercancías básicas. Tuvimos que cambiar de un viernes a un lunes la rutina de nuestros trabajos, con la incertidumbre de no conocer cómo ni cuándo íbamos a volver a nuestros puestos. Y también la falta de EPI para proteger a los que tenían que continuar con su trabajo en los muelles. Estamos aprendiendo exponencialmente a utilizar otras herramientas para comunicarnos vía online. Soy partidaria del encuentro de tú a tú, pero las circunstancias obligan y ahora mantenemos las reuniones por videoconferencia y hacemos más uso del teléfono, mensajes o email. Continuamos trabajando igual, o más, que antes del estado de alarma.

¿De qué manera ha afectado esta crisis al tráfico del puerto?

La crisis ha reforzado el tráfico del puerto de forma positiva. En los cuatro primeros meses del año hemos crecido un 5% respecto al mismo periodo del año anterior, y se han movido 11,2 millones de toneladas. La cifra de descargas (productos importados) durante este periodo ha sido la mejor de la serie histórica.

Hay que tener en cuenta que el Puerto es pieza clave en la cadena logística para el abastecimiento y suministro de mercancías esenciales en el estado de alarma y las operativas se han mantenido estos días, con tráficos como petróleo o gas natural, gasoil para el abastecimiento de los camiones que hacen el transporte por carretera o los productos agroalimentarios para consumo de la población.

En graneles líquidos se ha producido la mayor subida, sobre todo en gas natural licuado, que además, ha servido para garantizar el suministro de gas a la población y a sectores claves durante esta crisis sanitaria como hospitales e industrias

Otro de los tráficos donde el Puerto es líder, la exportación de ganado vivo hacia los países mediterráneos del norte de África, ha crecido más de un 70% respecto al mismo periodo del año anterior, superando ya la cifra de 300.000 animales.

Detrás de todo están los esfuerzos y la dedicación de personas que directa e indirectamente trabajan en el Puerto y que han hecho posible todo ello, desde aquí, una vez más, mi agradecimiento.

Entiendo que el tráfico de cruceros habrá sufrido un golpe tremendo.

Para este año teníamos las mejores previsiones tanto en escalas como en turistas y con nuevas navieras. Por desgracia, el coronavirus ha roto todas las previsiones, en un contexto sin precedentes.

Desde la Autoridad se sigue trabajando y apostando por este sector cuya rentabilidad para el Puerto es ser elemento tractor para el turismo regional, el comercio y la hostelería de Cartagena. Por ello, trabajamos con más ilusión y responsabilidad que nunca en buscar y preparar fórmulas y medidas que reactiven progresivamente la llegada de cruceros a nuestra Región. Además de la labor de promoción como destino seguro, estamos elaborando una batería de actuaciones con el objetivo de situar a Cartagena, con el post-Covid y la reactivación de la llegada de cruceristas, como un destino atractivo, uniéndose así a la iniciativa de la Comunidad de convertir a la Región como el destino turístico que mayor confianza y seguridad sanitaria ofrece a los visitantes. Además, contamos con una ventaja competitiva frente a otros destinos y es que, según las empresas dedicadas a los paquetes de cruceros, los barcos con pocos pasajeros y amplios espacios serán los primeros en regresar al mercado. Cartagena es un puerto no masificado e ideal para este tipo de barco, con una terminal cercana a una ciudad atractiva y a menos de 50 minutos de cualquier otro punto de la Región. Estamos preparados para garantizar un destino seguro.

Pese a todo, actualmente España se encuentra, y también nuestra Región, en una clara desventaja competitiva con respecto a otros países mediterráneos. El Gobierno de España debería de liderar e implementar «protocolos post covid19» y trabajar una iniciativa global para que los estándares sean iguales en todos los destinos turísticos del mundo, siendo España quien impulsara esa coordinación con países líderes para homologar protocolos a nivel internacional y estableciendo medidas de seguridad y protección de forma que pudiera aparecer en los rankings internacionales como un destino seguro. Sólo así tendremos una oportunidad para la recuperación, pero para eso es imprescindible entender y apreciar el valor del turismo.

¿Cómo valora la decisión de dejar al Puerto y al aeropuerto de Corvera fuera de la entrada de personas a España en la desescalada?

Los brotes previos de Covid-19 en buques de crucero han puesto de manifiesto la especial vulnerabilidad de los entornos cerrados durante los viajes largos. La incertidumbre marca este sector a causa de las restricciones a la movilidad impuestas por la mayoría de países para frenar la expansión del coronavirus y también por las prohibiciones de entrada de turismo hasta el levantamiento del estado de alarma.

La actividad en el puerto de Cartagena y del resto de España en el turismo de los buques de pasajeros es ahora mismo inexistente por ambas medidas. Se ha optado por algunos puertos para el atraque, y en algunos casos puesta a punto, y repatriación de la tripulación.

Pero creemos que aún estamos a tiempo de salvar una pequeña porción de la temporada crucerística si el Gobierno escucha al sector y es capaz de entender la potencia de nuestra industria turística, tanto para el puerto como para el Aeropuerto Internacional, entradas básicas y necesarias para la llegada directa y factible de turistas.

El Puerto vuelve a situarse a la cabeza con un beneficio que asciende a 19,3 millones de euros.

Situarnos a la cabeza en rentabilidad nos permite una situación financiera equilibrada y que estemos en disposición de liderar y colaborar a la recuperación económica en la Región y, se hace siguiendo las directrices de nuestro presidente regional, comprometiendo inversiones por valor global de 200 millones de euros que suponen una apuesta segura a nuestro Plan de Acción Inmediata para la Recuperación Económica frente a la covid-19.

La rentabilidad de un puerto es el factor básico ya que de ella dependen las futuras inversiones de nuestro Plan de Empresa, por ejemplo, en materia de sostenibilidad e innovación, aspectos claves en nuestro trabajo. Y ahora nos van a permitir afrontar la recuperación de la actividad en Cartagena y la Región. Es nuestra obligación convertirnos en palanca para la reactivación económica con nuevas infraestructuras, mantenimiento y ampliación de las existentes, innovación en productos y servicios.

¿Esta inversión puede verse comprometida?

Ser un puerto rentable asegura la financiación de los proyectos. Algunos trabajos ya se han iniciado: pavimentación, instalaciones, construcción de nuevos edificios, digitalización de servicios, zonas de esparcimiento para la población, entre otras. Son acciones que van a ayudar al crecimiento y estabilización de empresas y a la vez crear puestos de trabajo, especialmente las empresas pequeñas y medianas, que son el tejido productivo necesario y fundamental de la actividad económica.

Quiero agradecer la gestión de nuestro presidente regional y la colaboración de nuestros gestores municipales reflejados en la alcaldesa actual, Ana Belén Castejón, como en mi buena amiga y vicealcaldesa Noelia Arroyo, por su participación, ideas e ilusión que han puesto con este proyecto.

Notas personales

CLIMA POLÍTICO Le preguntamos a la presidenta de la APC por el clima político actual y asegura que «hay que unir esfuerzos para una recuperación lo más rápida y segura posible. La colaboración entre los distintos agentes implicados ha de ser colaborativa, cediendo y buscando el bien general. La Región de Murcia debe ser tratada en términos de equidad y justicia con el resto de territorios, con igualdad de oportunidades para todos, porque el ADN de la Región es buscar salidas y emprender el futuro por caminos de construcción que repercutan en el beneficio de todo el país». En cuanto a la anunciada inversión de 100.000 euros para proyectos locales, Yolanda Muñoz afirma que se trata de una línea de subvenciones y ayudas aprobadas antes de la pandemia, «pero entendemos que han de ir dirigidas ahora a paliar parte de los efectos de esta crisis socioeconómica. El plazo finaliza mañana, pero por la cantidad de consultas recibidas creemos que, si el año pasado recibimos casi 70, este año se multiplicarán».