«Anuncio que el Gobierno de la Región de Murcia permitirá en esta fase 2 que los establecimientos de hostelería alcancen el 50 por ciento de su aforo en el interior de sus locales y sus terrazas». El presidente de la Región, Fernando López Miras, podía elegir entre una horquilla de entre el 30 y el 50 por ciento de la capacidad de bares y restaurantes y ha considerado que la Comunidad está preparada para asumir la máxima apertura. Es el apunte más destacado de la undécima reunión entre Pedro Sánchez y los líderes autonómicos para dar cuenta de la gestión de la pandemia.

Totana es el único municipio de la Región que se queda en la fase 1 por el foco de casos positivos detectado en las últimas jornadas. López Miras agradeció que Pedro Sánchez se interesara por la situación de la localidad: «Me alegra saber que comparte nuestra preocupación y nuestra prudencia». Si la evolución de los datos es positiva, el jueves la comunidad solicitará que pase a fase 2.

El discurso del presidente del Ejecutivo regional estuvo trufado de llamadas a la responsabilidad ante el cambio de fase. «No podemos pensar que cada paso de la desescalada supondrá mayor presencia policial para controlar que se cumplan las normas. Tenemos que ser conscientes de que cada paso depende de nosotros», afirmó Miras, con un ojo puesto en la apertura de las playas y apelando a la responsabilidad de los bañistas para que hagan un uso seguro de las mismas para evitar contagios.

No obstante, Miras señaló, ante la posibilidad abierta por Pedro Sánchez de que el estado de alarma se levante antes en algunas comunidades que en otras, que los buenos datos de la Región abalarían que fuera una de ellas.

Capítulo de reproches

Tras once videoconferencias, se hace difícil encontrar argumentos nuevos en una y otra parte. Miras volvió a solicitar, como hizo la semana anterior, un IVA superreducido para estimular al sector turístico, «el que más padezca los efectos de esta pandemia».

En el amplio y ya tradicional capítulo de reproches al Gobierno central y su gestión durante estas comparecencias, Miras volvió a incidir en la tardía publicación de la normativa referente a los cambios de fase, en este caso sobre las condiciones de la reapertura de las playas. «A los alcaldes se les hace responsables de unas medidas que acaban de conocer y, por supuesto, que deben financiar sin ningún tipo de ayuda», afeó Miras. El más clásico de estos reproches es el de la infrafinanciación, personificado en esta pandemia en el reparto del fondo extraordinario de 16.000 millones de euros para financiar la lucha contra el virus de las comunidades autónomas. «Hoy hemos conocido un informe de la UMU que ratifica aquello que venimos denunciando: los criterios de reparto tan solo van a perpetuar la diferencia que sufrimos los murcianos. Donde un madrileño recibirá más de 400 euros, un murciano no llegaría a los 100 euros».

Pero ayer el presidente de la Región puso sobre la mesa un reproche del que hacía tiempo que no echaba mano: la llegada del AVE. Citó un plan de fomento del turismo para aquellas ciudades con tren de alta velocidad y lamentó que Murcia no sea una de ellas.

«Murcia debería estar ahí y todos sabemos por qué no lo está, porque alguien tomó la decisión de retrasar intencionadamente sin criterios técnicos la llegada del AVE», sentenció.

Critica la falta de información sobre la renta mínima vital

El presidente del Ejecutivo regional, Fernando López Miras, afeó a Pedro Sánchez que ni han recibido información sobre la renta mínima vital, que se aprobará el próximo martes, ni saben el papel que tienen que jugar en su puesta en marcha tanto las comunidades autónomas como los ayuntamientos para que sea efectiva a partir del mes de junio. Aprovechó este respecto para poner en valor la medida similar de su Gobierno. «La Región de Murcia lleva muchos años atendiendo las necesidades de sus habitantes, y lo hace a través de la renta básica de insercción. Desde luego, nos implicaremos en todo aquello que haga falta para mejorar la vida del millón y medio de murcianos», expresó Miras.