Juana María Martínez, su marido Patricio Saura y su hijo Patricio, de 6 años, son una de las familias murcianas que están participando en el estudio de seroprevalencia que ha iniciado el Instituto de Salud Carlos III de Madrid junto a todas las comunidades autónomas para conocer el alcance real de la pandemia de coronavirus en nuestro país y cuyos primeros resultados fueron dados a conocer el pasado miércoles.

La elección de los participantes se ha realizado al azar y de ella se ha encargado el propio Ministerio. Juana y Patricio recibieron una llamada de Sanidad hace diez días avisándoles de que eran una de las familias seleccionadas para el estudio y tras informales de en qué consistía les indicaron que debían presentarse el lunes pasado a primera hora en su centro de salud, en la pedanía murciana de Algezares, para que les tomaran las muestras de sangre y se les realizara el test rápido de inmunidad.

Juana María Martínez reconoce que en un primer momento la llamada le sorprendió, pero «participar en el estudio puede ayudar a saber muchas cosas de la enfermedad que se desconocen» como cuántas personas se pueden haber visto afectadas sin saberlo o cuáles son los síntomas más habituales.

En el estudio han participado los tres, ya que su hija mayor, de 28 años, ya no vive en el domicilio familiar.

Durante el primer contacto telefónico, les sometieron a un cuestionario en el que tenían que responder a preguntas sobre su estado de salud, si habían tenido síntomas, molestias o vómitos desde el mes de marzo a la actualidad. Juana María explica que ni su marido ni ella han tenido nada en este tiempo, pero su hijo pequeño sí que estuvo en los primeros días de la alerta con dolores de cabeza muy fuertes y fiebre.

«Ahí me preocupé mucho, ya que mi hijo no es un niño que suele ponerse malo», afirma. Pero, pese a que llamó al teléfono que puso en marcha la Consejería de Salud, no le hicieron la prueba. «Nos llamaron para saber si habíamos salido de viaje a otro país recientemente, pero como no habíamos estado de viaje sólo nos recomendaron que el niño guardara reposo en casa y que lo tratara como si fuera un resfriado normal, y que nosotros podíamos seguir acudiendo al trabajo sin problemas».

Esta vecina de Algezares dice que estaba convencida de que su hijo había tenido la enfermedad, por los síntomas y la fiebre tan alta que tuvo, «nada habituales en él». Sin embargo, la sorpresa llegó el lunes cuando tras la extracción de sangre y el test rápido de inmunidad en su centro de salud les confirmaron que los tres habían dado un resultado negativo y no habían pasado el coronavirus.

En el centro de salud de Algezares sólo les sacaron sangre e hicieron la prueba, ya que todo el cuestionario lo habían respondido por teléfono. «Le pedí a la enfermera que me sacara sangre a mí primero para que mi hijo viera que no era nada, ya que iba muy nervioso».

Esta familia murciana asegura que en su entorno no hay nadie que haya pasado la enfermedad, ni familiares ni amigos.

Sin embargo, la madre, Juana María, apunta a que en su lugar de trabajo, una peluquería del centro de la ciudad de Murcia, atendieron a la chica de 27 años que fue el primer caso confirmado en la Región y quien había estado en una boda en Madrid ese primer fin de semana de marzo. «La chica vino a peinarse junto a su madre para acudir a la boda unos días antes de ser diagnosticada e ingresar en el hospital».

Por ello no entiende por qué nadie de Salud se ha puesto en contacto con los responsables de la peluquería para hacerles las pruebas a las empleadas que estuvieron en contacto con ellas. «Se supone que a todos los casos confirmados les hacen un seguimiento, tanto a sus familiares como a quienes han estado en contacto con ellos en los últimos días, y a nosotros no nos han llamado», afirma.

La familia Saura Martínez forma parte de los más de 3.200 murcianos que están participando en el estudio de seroprevalencia del Instituto Carlos III y a quienes se les están tomando las muestras, distribuidos en 44 centros de salud de 24 municipios de la Región. En estas pruebas se les hace el test rápido serológico para comprobar si ha desarrollado inmunidad frente al coronavirus, lo que significaría que ha pasado la infección. Para que los datos sean fiables, el estudio contempla tres oleadas: la primera ya se ha llevado a cabo y terminó esta pasada semana, en dos semanas se les volverán a repetir las pruebas a todos los participantes y en un mes se les hará por tercera y última vez.

En toda España, la muestra se hará a 36.000 familias (unas 90.000 personas en total), y con ello se quiere obtener la primera fotografía de la realidad de la pandemia, cuyos primeros resultados muestran que sólo el 5% de la población ha pasado la enfermedad, el 1,4% en la Región de Murcia.