La pasada semana, la Unión Europea publicó un documento para autorizar acuerdos relativos a las medidas de estabilización del mercado en el sector de las plantas vivas y productos de la floricultura, bulbos, raíces y similares, flores cortadas y follaje ornamental, a raíz de la grave crisis que afecta al sector tras las pérdidas ocasionadas y que entra en vigor en el día de hoy.

Desde la Federación de Cooperativas Agrarias de la Región (Fecoam), denuncian que estas medidas no cuentan con presupuesto asignado ni medidas de crisis, «siendo el propio sector el encargado de financiar las acciones de promoción o retirada que se quieran llevar a cabo, lo que nos parece una verdadera tomadura de pelo», remarcan.

También recuerdan que las ayudas no tienen que venir únicamente desde la Unión Europea, sino que «pueden habilitarse desde el Ministerio de Agricultura o desde las propias Comunidades Autónomas. Tenemos el ejemplo de Holanda que va a sufragar con 600 millones las caídas de facturación por debajo del 30%», subrayan los responsables del sector de Fecoam.

Además, los acuerdos a los que lleguen los profesionales de la floricultura serán válidos a partir de hoy, 5 de mayo, «por lo que ni siquiera se incluirían las pérdidas y retiradas que se han registrado desde el comienzo de la pandemia en el mes de marzo y que ha afectado a todas las festividades y celebraciones de comienzo de primavera, uno de los principales mercados de este producto en Andalucía y Murcia, zonas estratégicas de producción y consumo».

Por ello, desde la Federación de Cooperativas Agrarias expresan su máximo desacuerdo con estas medidas y solicitan la articulación de una estrategia de crisis «adecuada, real y con dotación económica para asistir a un sector que no cuenta con mecanismos ni herramientas de crisis para poder reflotar».

Así, el nuevo reglamento autoriza a que agricultores, asociaciones, organizaciones de productores e interprofesionales que puedan durante 6 meses «celebrar acuerdos y adoptar decisiones conjuntas relativos a flores y plantas para llevar a medidas de retiradas del mercado para una destrucción ordenada o distribución gratuita, promoción conjunta para animar a los consumidores a comprar, planificación de la producción para coordinar la plantación de flores y plantas vivas con vistas al futuro levantamiento de las restricciones».