Los concesionarios de la Región están dispuestos a tirar la casa por la ventana para dar salida al stock acumulado por culpa de la pandemia de coronavirus. Las empresas que este lunes han abierto sus puertas con cita previa para atender a sus clientes ofrecen descuentos de hasta 8.000 euros en la compra de vehículos, según afirma el presidente de la patronal de concesionarios, José de la Cruz, que preside también el Gremio de Talleres (Gretamur). En la Región hay casi medio centenar de concesionarios, que emplean a más de 3.000 trabajadores, según los datos de la patronal nacional Faconauto. Estas empresas se acogieron a los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) cuando se declaró el estado de alarma y a partir de ahora irán rescatando a los trabajadores a medida que recuperen su actividad.

Según explicó José de la Cruz, todos concesionarios de la Región abrieron sus puertas este lunes, aunque solo han recuperado a una parte de la plantilla. En el servicio posventa calcula que se ha reincorporado entre el 50% y el 60% de los trabajadores, mientras que en la venta habría entre el 10% y el 15% del personal.

El presidente de la Asociación de Concesionarios recordó que el sector afronta 2020 como «un año con diez meses», dado que las ventas han sido mínimas desde mediados de marzo. Así, en el mes de abril tan solo se han matriculado 45 vehículos en la Región, que corresponden a operaciones anteriores al estado de alarma.

José de la Cruz asegura que «las marcas han puesto toda la carne en el asador» para dar salida a los vehículos que tienen en stock con ofertas y grandes descuentos, que pueden llegar a los 8.000 euros.

Recuerda que la automoción aporta en torno al 10% del PIB, por lo que considera necesario que «el Gobierno reaccione» y ponga en marcha un Plan Renove que facilite la sustitución de los coches más viejos. Alertó de que si no se recuperan las ventas, los fabricantes abandonarán el país, «tal y como está ocurriendo con Nissan en Barcelona».

Por su parte, Fulgencio Muñoz, responsable del concesionario de motos Ciao, dice que lo mejor es «no hacer previsiones a largo plazo, ir intentando superar el día a día hasta que todo se normalice». Muñoz nota a los clientes «muy concienciados. Una de las grandes diferencias es que se van y vuelven cuando se les avisa, no se tiran aquí toda la mañana», contaba. Más que reparaciones de urgencia, que sí han estado disponibles durante la cuarentena, los servicios más demandados ayer fueron de mantenimiento. «Estamos a medio gas, y tenemos que esperar para ver qué hacemos con el ERTE en el que nos metimos», concluía Muñoz.