El Instituto Murciano de Acción Social (Imas) está ultimando un plan de desescalamiento en las residencias de mayores, que contemplan la incorporación gradual y paulatina a las actividades y zonas comunes, pero no contempla las visitas de personas del exterior.

En el documento, el Imas reconoce que el confinamiento en las habitaciones de los usuarios está produciendo efectos secundarios "muy perjudiciales" a nivel físico, psicoemocional y social por lo que deben ser compensadas en el menor tiempo posible con otras que disminuyan los efectos colaterales y les aproximen a una "nueva normalidad" en estos centros "de forma progresiva".

La evolución actual de los datos epidemiológicos, aunque no permiten la vuelta a la situación anterior a la declaración de pandemia, permiten que se tomen ciertas medidas para reactivar la actividad en los centros, para que los residentes que se encuentren libres del coronavirus no sufran las consecuencias negativas en su salud que el confinamiento y la inactividad les está generando, ha añadido este organismo autonómico.

El plan deberá contemplar en su primera fase el desconfinamiento de los residentes en sus habitaciones y la incorporación gradual y paulatina a las actividades y uso de espacios comunes como comedores, zonas exteriores y salas de actividades supeditadas a las necesarias medidas de seguridad y protección.

Así, el personal y los residentes deberán mantener la distancia de seguridad mínima de 2 metros, deberán ventilarse las estancias durante 15 minutos seguidos dos veces al día y registrar diariamente los contactos estrechos que se hayan producido en la residencia.

Cada centro debe reforzar su programa de limpieza y desinfección incorporando éste de forma intensiva en los espacios y paramentos de las salas de uso común, pasillos de recorrido por los residentes, así como elementos de zonas exteriores utilizados.

La priorización para escalar la participación de los residentes ha de realizarse partiendo de la valoración individual de cada uno y del grado de deterioro que la situación de confinamiento está provocando en su salud y bienestar, a niveles físicos, psicoemocionales y psicosociales.

No obstante, se procurará intensificar las actividades psicoestimuladoras y de ocio en los tiempos que los residentes permanezcan en las habitaciones, además de reforzarse el programa de comunicación y relaciones entre residentes y familiares a través de videollamadas.

Los espacios exteriores del centro, como jardines, plazas y patios, son los más indicados para utilización por los usuarios, tanto para actividades dirigidas, como para esparcimiento, mientras que las salas de actividades de rehabilitación deberán usarse de forma individual o por grupos pequeños de usuarios según su aforo.

Respecto al proceso de desescalada para los servicios de atención temprana, centro de día, promoción de la autonomía personal y otros servicios de atención a personas con discapacidad en la Región de Murcia se iniciará de manera progresiva.

Por ello, en la primera semana de la Fase 1, que comenzará este lunes, se recomienda el acondicionamiento de las instalaciones, la provisión de material de protección y seguridad, la elaboración de los planes contingencia y otras medidas previas al inicio de la actividad presencial.