¿Con que frecuencia se ha masturbado en el último año? Es una de las preguntas que planteaba en su estudio el observatorio #MurciaSexProject del Instituto Sexológico Murciano. En el caso de las mujeres preguntadas, solo el 5% indicaron hacerlo casi todos los días en contraste con el 19,6% de hombres que sí decían hacerlo con esa frecuencia.

El porcentaje mayor de mujeres se situaba en una frecuencia de masturbación de una vez al mes, mientras que en el caso de los varones en una frecuencia de varias veces por semana.

A este respecto, el director del Instituto Sexológico Murciano explica que «la frecuencia de masturbación tan dispar entre hombres y mujeres, junto con el dato de que a una de cada cuatro murcianas no les gusta masturbarse, reflejan una concepción muy distinta sobre la masturbación por géneros aun en nuestros días».

Desde el punto de vista del experto, «esto se debe mayoritariamente a cuestiones socioculturales que, afortunadamente, parece están cambiando en los últimos años, y que espero tendrán reflejo en las nuevas generaciones».

Con guías para aprender

También revela el estudio que el 73% de las mujeres y el 67% de los hombres aprendió solo a masturbarse: en el 12% de las mujeres, alguien les enseñó mientras que en el caso de los hombres este porcentaje es ligeramente superior con un 15,2%.

«Si bien en los últimos años existe bastante polémica entre los expertos en relación a incluir pautas de aprendizaje en masturbación en programas de educación afectivo sexual, no queda claro aún a que edades deberían realizarse y de qué manera», comenta Jesús Eugenio Rodríguez.

Ignacio Cerdán, tras el mostrador de su negocio del centro de Murcia. Israel Sánchez

En cuanto a de qué formas se masturba habitualmente, el estudio detalla que, en el caso de las mujeres se encontraron muchas más modalidades, aunque la más frecuente (usada por un 65% de las consultadas) fue la manual. Pero hay más: el rozamiento con algo es la opción favorita para un 11% de las murcianas consultadas, mientras que un 9% utilizan juguetes sexuales y un 3% prefiere un chorro de agua.

En los hombres hay menos variedad: mayoritariamente, un 98% indicó la estimulación manual, mientras que de forma muy residual se establecieron otras formas de masturbación, como el uso de juguetes sexuales y solo apretar los muslos.

«Los hábitos de masturbación, y en especial la forma en cómo lo hacemos son un factor importante en el inicio y mantenimiento de trastornos como la eyaculación precoz y retardada en el hombre y en casos de anorgasmia coital en la mujer», remarca el director del Instituto Sexológico Murciano, al tiempo que manifiesta que «en la actualidad los tratamientos para estas disfunciones sexuales centran parte de sus esfuerzos en programas educativos en los que se dan estrategias y pautas de masturbación más saludables que permiten corregir estas disfunciones».

La primera medida que Ignacio Cerdán adoptó en el sex shop Fiexta, en el centro de Murcia, cuando volvió a abrir, fue establecer un control de aforo, «aunque nuestra afluencia normalmente es discreta», comenta. Así, el dueño del negocio apuesta por «dar un mejor servicio con solamente una persona por trabajador».

A los clientes, que han de llamar por teléfono para concertar una cita previa, «les sugerimos que vengan con mascarillas y con guantes, aunque se los proporcionamos aquí si no los tuvieran», asevera Cerdán, que en el mostrador tiene botes de hidrogel para las manos. Aunque insiste en que en su tienda «no suele haber problemas de overbooking», prefiere que los clientes «en media hora máximo seleccionen un producto». Eso sí, sin abrir vitrinas ni tocar artículos, por precaución.