El cambio de rutinas, las preocupaciones y el no poder salir de casa ha cambiado el ritmo de sueño de muchos murcianos durante la pandemia del coronavirus. Para conocer hasta qué punto ha afectado el Covid-19 al descanso de la población, la Unidad Regional del Sueño del Servicio de Neurofisiología del Hospital Reina Sofía de Murcia ha iniciado un estudio sobre la calidad del sueño de los murcianos durante la etapa de confinamiento y está dando los primeros pasos para conocer dónde está el origen de esta falta de descanso y cómo ponerle solución.

Al frente de este trabajo está la doctora Virginia Izura,jefa del Servicio de Neurofisiología del Reina Sofía, quien explica que decidieron dar el paso para analizar esta situación porque «comenzaron a llegarnos quejas de pacientes y personas conocidas indicando que en estas semanas había empeorado su calidad de sueño con motivo del confinamiento y comenzamos a barajar distintas teorías».

La doctora Izura señala que hay distintos factores que pueden afectar al sueño, como el propio reloj biológico que va cambiando al aumentar también las horas de luz solar, los factores externos, rutinas como alargar la hora de marcharse a la cama por la noche y, por lo tanto, la de levantarse por la mañana, etc. Así que la semana pasada comenzaron a pasar una encuesta en la que se pregunta a la persona entrevistada datos como: edad, sexo, cómo dormía antes del confinamiento y cómo lo hace ahora, cuáles son sus rutinas, su profesión, si han cambiado sus horarios, si realizan algún tipo de actividad física, si tienen alguna preocupación laboral o familiar y si han percibido un empeoramiento en su descanso, si les cuesta conciliar el sueño o si se despiertan por la noche, entre otras cuestiones.

La encuesta ha sido difundida por grupos profesionales, la plataforma interna del Hospital y a través del Colegio de Médicos de la Región y hasta el momento ya se han recibido más de 1.600 contestadas, respuestas que han comenzado a analizarse.

La jefa del Servicio de Neurofisiología del Hospital Reina Sofía indica que tras una primera revisión a las encuestas, que habrá que analizar más detenidamente, el 60 por ciento de los encuestados reconoce tener peor calidad del sueño que antes del confinamiento y una de las principales razones es el haber alargado la hora de acostarse por la noche, pese a que en la mayoría de los casos se ha mantenido un horario y rutinas de actividad física.

Siestas más largas

Otra de las causas de las alteraciones de sueño que se han producido son las siestas, ya que en estas semanas la población está haciendo siestas más largas, de hasta 40 minutos diarios, cuando lo recomendado son siestas de 20 minutos. «Esto también hace que se reduzca la carga de sueño cuando llega la noche», apunta la doctora.

A este descanso excesivo durante el día se une también «la angustia indefinida que sienten, ya que hay una gran incertidumbre ante el futuro y eso es lo que más preocupa a los ciudadanos, el qué ocurrirá después, incluso más que el temor a la propia enfermedad», afirma Virginia Izura, quien espera tener los resultados definitivos del estudio en las próximas semanas.