Los hoteles de la Región no se plantean abrir sus puertas hasta el 1 de julio. Aunque el plan de desescalada programado por el Gobierno establece que podrían empezar a recibir clientes a partir del 11 de mayo, el presidente de la Asociación de Hoteles de la patronal Hostemur, Juan Carlos García, recuerda que van a seguir prohibidos los desplazamientos entre provincias, por lo que se pregunta: «¿Para qué vamos a abrir si no nos dejan que tengamos clientes?»

Los hoteles no fueron incluidos inicialmente entre las actividades que cerraron al decretarse el estado de alarma el 14 de marzo, pero tuvieron que bajar la persiana unos días después. Según indicó el representante de Hostemur, en la Región hay 175 establecimientos hoteleros, que emplean a unas 2.500 o 3.000 personas, aunque esta cifra aumenta de forma considerable en temporada alta.

Después de haber perdido la campaña de primavera, Juan Carlos García da por hecho que los hoteles no se están planteando abrir «al menos hasta el 1 de julio», salvo alguna excepción, dado que los planes de desescalada no contemplan todavía los desplazamientos entre comunidades autónomas. «No conozco hoteles que puedan estar sin clientes, aunque se permita abrir a partir del día 11 de mayo. No tiene sentido abrir si los ciudadanos no pueden moverse de su provincia. Esta es otra incongruencia más de este Gobierno», destacó.

Juan Carlos García se pregunta incluso si habrá viajeros dispuestos a desplazarse a la Región mientras no existan garantías de que «van a poder disfrutar el tiempo de ocio, visitar los museos o asistir a algún acontecimiento cultural y con qué aforo», dado que prácticamente todo fue suspendido ante la falta de previsiones sobre el tiempo que durará la pandemia y sobre las limitaciones que tendrán que mantenerse una vez que remita.

«Somos un eslabón de la cadena. No se sabe todavía si la gente podrá bañarse en la playa o si habrá chiringuitos para tomarse una cerveza. Así es difícil que alguien tome la decisión de viajar», apuntaba. A su juicio, lo único que existe desde que se decretó el estado de alarma «son incertidumbres» que no permiten albergar ni siquiera la esperanza de salvar el verano.

El presidente de la Asociación de Hoteles da por hecho incluso que 2020 «va a ser un año perdido», por lo que entiende que las empresas se enfrentan a una situación «dramática».

Su previsión es que los hoteles de la Región facturarán este año entre un 70% y un 80% menos que el año anterior.

«Vamos a ver las empresas que pueden sobrevivir al estado de alarma y lo que viene después, porque puede ser peor. El año pasado vinieron a este país 83 millones de turistas, pero este año llevamos cero visitantes desde marzo», se lamentó.