A primera hora de la mañana y sin nadie que le recibiera, así fue la llegada ayer del BIO Hespérides tras completar su XXV Campaña Antártica. La crisis sanitaria ha impedido que los familiares de los marinos estuvieran a pie de escalerilla esperando a poder verlos tras 161 días de ausencia.

La tripulación tocaba tierra tras un periodo de 42 días de aislamiento a bordo desde la última vez que pudieran pisar puerto en Punta Arenas (Chile) el pasado 11 de marzo.

La nave ha ayudado a realización de nueve proyectos científicos impulsados por distintas entidades y organismos y a la apertura de las bases que España tiene en el continente helado.