Las 15.000 mascarillas defectuosas que el Gobierno central envió a la Región de Murcia siguen trayendo cola. Sesenta profesionales y cinco facultativos pertenecientes a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Santa Lucía de Cartagena se encuentran en estos momentos en cuarentena por recomendación de Salud Laboral tras hacer uso durante 48 horas de mascarillas defectuosas que el Ejecutivo de Pedro Sánchez envió a la Comunidad Autónoma, y que fueron distribuidas a los sanitarios.

El temor es que, debido a estos defectos, los profesionales que se dejan la piel atendiendo a los más vulnerables puedan haberse contagiado más fácilmente, al no contar con protecciones idóneas.

Tal y como indican desde la Consejería de Salud y el Hospital Santa Lucía, ahora se comenzarán a hacer pruebas PCR a las sesenta y cinco personas para comprobar si alguno de los profesionales o facultativos se han contagiado de coronavirus.

Del mismo modo, informan que los sanitarios ya han sido sustituidos para que el servicio pueda desarrollarse con normalidad. La UCI del Santa Lucía cuenta con una plantilla que ronda los 160 profesionales.

Sin embargo, se da la circunstancia de que las mascarillas defectuosas se distribuyeron no solo en Cartagena, sino por toda la comunidad murciana. A este respecto, desde la Consejería de Salud apuntaron que «se recibieron 15.000 mascarillas del Ministerio que se repartieron en los hospitales y en centros de salud de todas las áreas, excepto en el Área 4», la que pertenece al Noroeste.

«El Servicio Murciano de Salud seguirá las indicaciones que dictamine el servicio de Salud Laboral y actuará, siempre en base a los criterios de este Departamento, velando por la seguridad y bienestar de todos sus profesionales», detallan desde la Consejería, sin aclarar si se procederá a aislar a los sanitarios que recibieron estas protecciones en mal estado.

«El SMS dio indicación de manera inmediata, tras recibir la alerta, de que no se utilizaran estas mascarillas, que han sido retiradas de todas las áreas», subrayan desde el departamento que dirige Manuel Villegas.

Como es habitual, el consejero comparecía este sábado, un día más, para informar sobre la situación de la pandemia en la provincia. Y hablaba de las mascarillas defectuosas. Según Villegas, se usaron «como mucho» durante 48 horas, aunque no descarta que puedan haber supuesto mayor incidencia de contagios entre el personal sanitario que las usó, algo que por el momento no es posible conocer.

Fue el jueves cuando en el departamento regional de Salud recibieron la alerta del Ministerio de Illa para retirar una marca concreta de mascarillas, por lo que «hemos dado la orden a los centros para retirarlas, ya que no protegen como deberían y no cumplen las expectativas que se tenían sobre ellas», daba a conocer Villegas el viernes en su comparecencia.