La asistencia a las Urgencias en la Región de Murcia se han reducido drásticamente tras el decreto del estado de alarma a consecuencia de la expansión del coronavirus y el área de Pediatría no ha sido una excepción. Desde el Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca afirman que las consultas en las Urgencias de Pediatría se han reducido en torno a un 75% desde que comenzara la crisis sanitaria.

El principal motivo de este descenso, aseguran, es el buen funcionamiento del teléfono único regional de Pediatría, que se puso en marcha el mes pasado. Este teléfono, el 607750113, funciona de 9 a 21 horas de lunes a domingo. «Somos más de veinte médicos los que llevamos este 'busca'», explica el pediatra de la Arrixaca David Gil. Para él, que haya una única coordinadora para esta especialidad es de gran ayuda, así como que muchos de sus compañeros sigan trabajando desde casa, vía telefónica. «Muchas personas no tienen a quién acudir y solventamos su angustia, les tranquilizamos y, generalmente, evitamos que acudan al centro hospitalario».

El pediatra de la Arrixaca David Gil destaca también el buen uso que la sociedad está haciendo de las Urgencias. «Las consultas banales han desaparecido y ya nadie viene porque su hijo está con mocos o tiene un catarro», comenta. Aunque los profesionales sanitarios esperan que, una vez pase la pandemia de la Covid-19, «algo de esto quede», recuerdan que las consultas presenciales siguen funcionando con normalidad tanto en la sanidad pública como en la privada, por lo que nadie que piense que su hijo necesita un médico debe quedarse en casa. «Sigue habiendo enfermedades que hay que ver y hemos tenido algún caso de padres que han traído a Urgencias a su hijo más tarde de lo que debían», cuenta Gil, recordando el caso de un pequeño con una hernia.

Los pediatras cuentan con un listado de enfermedades de riesgo que son tomadas de forma preferente porque necesitan un diagnóstico precoz. Entre ellas, están las dolencias crónicas que afectan al pulmón y al corazón. También están incluidos los pacientes oncológicos bajo tratamiento inmunodepresor y aquellos niños con enfermedades metabólicas y raras, así como aquellos con dolencias que se puedan descompensar con facilidad.

Pacientes positivos

Por suerte, la Covid-19 no es una enfermedad que afecte gravemente a los más pequeños. «Aquellos que son sospechosos de portar el virus se quedan en casa y no necesitan hospitalización», afirma el doctor Gil, que reconoce también que en la mayoría de los casos no se ha llegado a diagnosticar. «Para cuando se les pueda hacer las pruebas ya habrán superado la enfermedad».