La Federación Regional de Empresarios de Hostelería y Turismo, Hostemur, ha advertido este martes de que el aplazamiento de celebraciones por la crisis sanitaria del COVID-19 "está llenando el calendario tras el verano", lo que puede provocar un "posible colapso" durante esas fechas en los establecimientos del sector.

Según informó la organización en un comunicado, el aumento de celebraciones como las comuniones para después del periodo estival puede ocasionar "dificultades" para el sector, con lo que ha pedido "compresión y ayuda" para la hostelería.

"Se están intentando colocar las comuniones los sábados de septiembre y octubre, pero para esos días ya hay otras reservas, como por ejemplo de numerosas bodas", ha señalado el presidente de Hostemur, Jesús Jiménez, que apunta que "lo más recomendable" es que "todavía no se fijen fechas porque el panorama de la reincorporación a la actividad del sector hostelero aún es incierto".

Y es que estas celebraciones, que se ven desde el sector como una "bomba de oxígeno" después de las semanas de "cierre obligado" para los establecimientos, pueden causar "un serio problema".

"Pedimos encarecidamente que las comuniones se pongan los domingos de septiembre y octubre, y los sábados de noviembre. Así lograremos dos objetivos: por un lado, dar servicio a todos nuestros clientes y, por otro, lograr ese empujón que vamos a necesitar ", ha afirmado Jiménez, tras señalar que incluso se ha hecho llegar al Obispado esta petición desde Hostemur.