Los sindicatos consideran que los cálulos de la Consejería de Empleo sobre el número de trabajadores incluidos en los ERTE se han quedado muy cortos. Mientras que el departamento de Miguel Motas cifra en algo más de 107.000 los trabajadores incluidos en los expedientes de regulación temporal de empleo presentados por las empresas de la Región, Comisiones Obreras calcula que el número de empleados que están en casa debido al cierre de empresas ronda ya los 200.000. Por su parte, UGT sitúa la cifra entre los 120.000 y los 150.000.

Antes de que el Gobierno decretaria el estado de alarma para parar la expación del coronavirus había en la Región cerca de 600.000 personas dadas de alta como asalariados y como autónomos. De ellos, solo continúan activos los que trabajan en la agricultura, el comercio de alimentación, el transporte, la sanidad y el resto de servicios asistenciales. «Queda en pie lo que queda», dijo la secretaria de Política Sindical de UGT, que reclama «un plan estratégico» para afrontar esta situación. A su juicio, la economía regional se enfrenta a «un agujero negro» al que debería anticiparse el Ejecutivo regional con «visión de futuro».

Por su parte, la secretaria de Organización de CC OO, María Jesús Gómez, considera que las cifras de Empleo están muy lejos de los 200.000 trabajadores que, según sus cálculos, pueden estar incluidos en los ERTE. Destaca que la aparición de expedientes de empresas de la agricultura o la pesca demuestra que no es suficiente con «un certificado de responsabilidad de la empresa para realizar un ERTE».