Grupo Ricardo Fuentes ha reforzado su compromiso con la Fundación Hospitalidad Santa Teresa, organización con la que viene colaborando en los últimos años a través de la entrega de alimentos y del impulso de actividades socio-culturales.
Entre otras iniciativas, la empresa ha donado recientemente 847 kilos de alimentos que la ONG podrá repartir entre personas sin hogar. La cifra se ha alcanzado con la aportación de los trabajadores de la compañía, más lo que ha entregado directamente la propia empresa.
La donación ha incluido alimentos no perecederos como garbanzos, lentejas, azúcar, pasta, latas de atún o de sardinas, leche o aceite que la fundación va a utilizar durante las próximas semanas en su comedor social.
«Conocemos de primera mano la extraordinaria labor que realiza la Fundación en Cartagena y, como hasta ahora, podrán seguir contando con nuestra colaboración para sus programas de ayuda de social», ha explicado Cristina Fuentes, miembro de la gerencia del Grupo Ricardo Fuentes.
Además, Grupo Ricardo Fuentes ha apoyado diferentes eventos socio-culturales que la Fundación Santa Teresa ha impulsado, como su carrera solidaria. Para los próximos meses, también está prevista la organización de una actividad formativa en las instalaciones de la fundación que impartirán responsables de la empresa.
La Fundación Santa Teresa es una institución benéfica que presta acogida a personas sin recursos desde hace más de 100 años, con el objetivo de que puedan cumplir sus necesidades básicas de alimentación, descanso e higiene. Su albergue tiene capacidad para hasta 120 personas y en su comedor social en donde se atienden una media anual de 250 personas, más otras 700 que retiran alimentos.
Por su parte, Ricardo Fuentes e Hijos es un grupo empresarial dedicado a la producción y comercialización de pescado. Con sede en Cartagena, emplea a más de 900 trabajadores y es referencia mundial en innovación. La compañía cuenta con instalaciones para conservar el pescado a -60º y es la única empresa que ha conseguir cerrar el círculo consiguiendo la cría del atún rojo en cautividad con un proyecto desarrollado junto al Instituto Español de Oceanografía.
