El agua subterránea representa una fracción importante de la masa de agua presente en los continentes, bajo la superficie de la Tierra y, actualmente, al menos la mitad de la población mundial depende de ella para un consumo de agua seguro.

El agua subterránea es parte de la precipitación que se filtra a través del suelo hasta llegar al material rocoso que está saturado de agua. Ésta se mueve lentamente hacia los niveles bajos, generalmente en ángulos inclinados (debido a la gravedad) y eventualmente llega a los arroyos, los lagos y los océanos. El volumen del agua subterránea es mucho más importante que la masa de agua retenida en lagos o circulante, y aunque menor al de los mayores glaciares, las masas más extensas pueden alcanzar un millón de kilómetros cuadrados.

El agua del subsuelo es un recurso importante y de éste se abastece a gran parte de la población mundial,? pero es de difícil gestión por su sensibilidad a la contaminación -la cual puede ocurrir de fugas desde sistemas de saneamiento básico, aguas residuales, vertederos, estaciones de servicio, o de la aplicación de fertilizantes en la agricultura, entre otros factores- y a la sobreexplotación.

Los acuíferos africanos

Más de 300 millones de personas en África no pueden acceder a una fuente de agua potable, y apenas el 5% de la agricultura en el continente es de regadío. Aparentemente, se podría pensar que África es una zona del planeta árida y seca atendiendo a la geología externa (la mitad de su superficie la ocupan desiertos), pero nada más lejos de la realidad. Un reciente estudio realizado por investigadores del Reino Unido subraya que los acuíferos albergan una cantidad suficiente para paliar el problema endémico de la sequía. El trabajo, publicado en la revista Envirnmental Research Letters, representa el mapa más detallado que se ha realizado hasta el momento de estos recursos.