El hashtag #YoMeQuedoEnCasa, que en las últimas horas se ha popularizado en las redes sociales como una forma de concienciar a la población para que permanezcan en sus hogares ante la crisis sanitaria provocada por el coronavirus, empieza a convertirse en la única opción para los murcianos. Y es que las opciones de ocio se han visto reducidas casi a la nada con el cierre de centros comerciales, cines, restaurantes, salas de exposiciones, etc.
El Grupo Orenes, por ejemplo, anunció ayer, por medio de un comunicado de prensa, el cierre cautelar del Mercado de Correos, del Restaurante Rincón de Pepe, La Muralla y del recientemente inaugurado Complejo de Ocio Odiseo. «Con esta medida, desde la compañía queremos seguir colaborando en la protección y seguridad de todos nuestros clientes, empleados y con la sociedad en general ayudando a las autoridades sanitarias a paliar los efectos de esta pandemia lo antes posible», apuntaba su gabinete de prensa.
Por su parte, El Corte Inglés echará la persiana (temporalmente) de su superficie en Cartagena en respuesta a la Orden de la Consejería de Salud por la que se insta la activación del Plan Territorial de Protección Civil de la Región de Murcia y que afecta, entre otros, al municipio de la ciudad portuaria. «Esta medida -aclararon- no afecta al supermercado, que permanecerá abierto al igual que el Supercor de La Manga».
El Corte Inglés ha hecho extensiva esta medida a sus centros en País Vasco y Madrid, aunque más severos han sido los diregentes de Burger King: «Anunciamos el cierre de todos los establecimientos propios de la cadena en la península desde hoy, sumándose a las últimas recomendaciones del Gobierno para contribuir a evitar la propagación de Covid-19. Además, recomendamos el cierre inmediato a todos los franquiciados de la marca».
Por supuesto, la orden de aislamiento de los municipios costeros de la Región deja a los murcianos sin playas, y hasta el obispo de Cartagena, José Manuel Lorca Planes, ha liberado a sus fieles de la obligación de ir a misa. Con lo que salir de casa este fin de semana ha pasado de ser una recomendación a casi una obviedad.
La presidenta de la Asociación de Comerciantes de Trapería y Platería, Marisa Cano, una asociación que agrupa a unos 70 establecimientos, ha confirmado que, a lo largo de la mañana y de la tarde, las tiendas asociadas cerrarán sus puertas por "responsabilidad" y para ayudar a frenar el avance del 'Coronavirus'.
Cano ha señalado que, aunque aún no es obligatorio, han decidido tomar esta decisión "difícil de tomar por lo que supone, porque comemos de lo que sacamos de nuestra caja", aunque ha añadido que "tenemos que ser responsables y quedarnos en casa para poder al virus".
