Cuando el colectivo Mar Vivo convocó por redes sociales una sentada de protesta en la playa de Villananitos esperaba una asistencia máxima de unas 50 personas. Para su sorpresa, ayer se encontraron con unos 300 asistentes al evento. La mayoría extranjeros, franceses, belgas, alemanes e ingleses, ligados de una u otra forma al Mar Menor.

El objetivo principal de la protesta era demandar a las instituciones una actuación efectiva que mejore la situación en la que se encuentra la laguna.

No obstante, la sentada también sirvió de punto de partida para la creación del Movimiento de Ciudadanos Cansados y Enfadados. A la cabeza de esta nueva plataforma se han situado extranjeros que residen en la Región y que consideran la zona del Mar Menor la mejor para pasar el resto de sus días.

Un centenar de ciudadanos se interesaron por ingresar en el colectivo y cedieron sus datos a los organizadores del acto.

Entre los integrantes del Movimiento de Ciudadanos Cansados y Enfadados se encuentran personas de los citados países que han visitado en diversas ocasiones la zona y quieren retirarse allí.

El evento se completó con las intervenciones de varios de los presentes y la lectura de un manifiesto en la que listaban sus reivindicaciones.

Como colofón final del acto, Simón, un inglés que vive en Torre Pacheco, entonó con su guitarra una canción dedicada al Mar Menor.