Tras dos décadas al servicio de la Región de Murcia y con el firme propósito durante los últimos años de dar respuesta a los desafíos marcados por la Agenda 2030, el Hospital de Molina trabaja diariamente para transformar esos 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible y las 169 metas impulsadas en septiembre del año 2015 por las Naciones Unidas en realidades.

Desde este centro hospitalario se tratan de involucrar tanto profesionales como pacientes en cada uno de los objetivos que buscan el desarrollo sostenible en ámbitos como el económico, el social o el medioambiental. Uno de los pilares fundamentales de este hospital es el compromiso existente con la humanización de la sanidad, llevando a cabo medidas como la potenciación de la empatía, la adpatación de instalaciones hospitalarias siguiendo unos criterios ajustados a cada tipo de paciente, o la mejora de la información recibida por el paciente desde su entrada en el hospital hasta que se le da el alta. «Es fundamental que el paciente pueda incorporarse al proceso de toma de decisiones sobre sus patologías y su estado de salud. En definitiva, desarrollar una buena formación del paciente en materia de salud», declaró durante su intervención en el debate Marta Isabel García, directora de Comunicación y RSE del Hospital de Molina.

Uno de los principales motivos por los que este centro sanitario se encuentra a la cabeza del sector en cuanto a optimización de recursos por parte de las organizaciones se refiere, es la implantación desde el año 2011 del modelo de metodología Lean Six Sigma, que se basa en la utilización de un conjunto de herramientas estadísticas que busca eliminar todos los aspectos que impidan que el producto en concreto no cumpla con los requisitos del cliente, a quien se le da prioridad, reduciendo al máximo estos defectos en la presentación final del servicio.

Este propósito de optimizar recursos nace como respuesta a la problemática de la infrafinanciación que sufre el sector sanitario, y que obliga a la creación de alianzas entre instituciones del sector público y del privado para paliar de algún modo esta falta de financiación. Gracias a esta metodología, la prevención toma un papel fundamental en todas las metas que plantea esta tercera ramificación de los ODS. «Habría que unir la prevención con la educación sanitaria, ya que es algo necesario y no muy caro de cara a la inversión económica», añadió Marta Isabel García.