­Ha pasado la mayor parte de su vida observando el firmamento e intentando desentrañar las muchas incógnitas que existen en torno al Universo. Los meteoritos se convirtieron en su objeto de estudio para, a partir de ellos, intentar averiguar cuáles eran las características de la materia primitiva y cómo se originó el Universo y la vida. El meteorito de Molina de Segura -el más grande de España con sus más de 112 kilos- ha sido uno de los grandes protagonistas de sus estudios. Martínez Frías es director del Grupo de Investigación del CSIC de Meteoritos y Geociencias Planetarias, presidente de la Red Española de Planetología y Astrobiología (REDESPA), profesor Honorífico del Departamento de Ingeniería Aeroespacial de la UC3M y miembro de los equipos de ciencia de las misiones a Marte: NASA-MSL (rover Curiosity), ESA-ExoMars y NASA-Mars2020

¿Cómo surgió su interés por las Ciencias del Espacio?

Mis padres contribuyeron de manera decisiva a promover mi curiosidad. Siempre me ha interesado el espacio y con 8 años la llegada a la Luna me dejó totalmente impresionado. Luego vinieron los libros de divulgación y las novelas y el cine de ciencia ficción y, justo antes de entrar en la universidad, Enrique, mi fantástico profesor de Geología del instituto Calderón de la Barca de Madrid, me situó en la trayectoria académica adecuada. Posteriormente, estando ya en la Facultad, algunos de mis profesores, y Carl Sagan, con la maravillosa serie 'Cosmos', hicieron que supiera a lo que quería dedicarme.

¿De qué forma contribuye el estudio de los meteoritos a conocer más sobre los cuerpos celestes?

Los meteoritos son fundamentales para comprender cómo se estructuran los elementos químicos generados en las estrellas y cómo eran las características de la materia primitiva a partir de la cual se formaron los planetas, asteroides, lunas, planetas enanos, etc, y emergió y se desarrolló posteriormente la vida. De momento, nuestro sistema solar es el ejemplo más directo para extrapolar sus materiales y procesos a otros lugares del universo.

¿Qué descubrimientos fueron posible a raíz del meteorito que aterrizó en Molina en 1858?

El meteorito de Molina es una condrita ordinaria extraordinariamente interesante, que constituye una pieza más en el intrincado puzzle de los estadios primitivos de nuestro sistema solar y que figura en los catálogos internacionales más prestigiosos del mundo. Las condritas son meteoritos indiferenciados y, por ello, son probablemente los más interesantes desde el punto de vista astrobiológico, en relación con el origen de la vida.

Este año es el Año de Marte ¿qué objetivos tiene cada una de las cuatro misiones que se van a llevar a cabo en el planeta vecino?

Efectivamente. Este año habrá cuatro misiones que se dirigirán al planeta rojo. Destacaría dos de ellas en las que me cabe el honor de participar como miembro de los equipos de ciencia: ExoMars de la ESA y Roscosmos y NASA-Mars2020 de EEUU. Las otras dos corresponden a China (Huoxing-1) y a Emiratos Árabes Unidos (Hope). Las cuatro tienen como destinos diferentes zonas de Marte, con sus propias peculiaridades geológicas y objetivos científicos concretos en los que utilizar su compleja instrumentación miniaturizada. Las tres primeras disponen de un rover y la cuarta solo de un orbitador.

¿Cree que en un futuro se podrá llegar a viajar a Marte o incluso a colonizarla?

Mi opinión es que aún faltan años y que la Luna será una plataforma intermedia muy importante para conseguirlo y para desarrollar actividades en paralelo en un entorno más cercano a la Tierra. Pero estoy convencido de que el ser humano ampliará, poco a poco, sus fronteras más allá de la Tierra, colonizando Marte como primer paso y posteriormente otros planetas y lunas.

¿Se puede predecir en la actualidad el impacto de un asteroide en la tierra? ¿Qué posibilidades existen de que impacte otro gran meteorito en la Tierra como el que llevó a la glaciación del planeta?

Si conocemos las trayectorias y las características de los asteroides sí es posible predecir el impacto. Otro tema es que podamos evitarlo. Al igual que no podemos evitar que se produzca una erupción volcánica o un terremoto, debemos ser conscientes de que este tipo de catástrofes naturales existen y que -aunque con una periodicidad temporal a escala geológica y no humana-, vienen acompañando la coevolución geológica y biológica de la Tierra. La probabilidad de impacto existe, aunque es muy baja; yo diría que centrada especialmente en objetos de entre 50 y 300 metros. No obstante, al igual que en cualquier desastre o catástrofe natural, debemos estar preparados y saber cómo actuar.

Si pudiéramos cuantificar los conocimientos que tenemos sobre el universo en porcentaje ¿que porcentaje queda por descubrir?

Hemos avanzado muchísimo, principalmente en el último medio siglo. No obstante, estamos solo saliendo de nuestra cuna, la Tierra, y tras cada respuesta surgen nuevas cuestiones. Así avanza la ciencia. Creo que no es posible aportar aún porcentajes, pues nos queda todo por descubrir.

¿Cuál cree que será el fin del planeta Tierra?

Nos encontramos aproximadamente a la mitad de la vida estimada de nuestro planeta, que ya tiene más de 4.500 millones de años. Ya han ocurrido al menos cinco grandes extinciones masivas y todo indica que nosotros estamos actuando como un auténtico sexto agente de extinción a escala global. No obstante, ocurra lo que ocurra, la vida es más robusta que nosotros. Los organismos extremófilos así lo atestiguan. Y, por supuesto, la Tierra aún más que la vida. Sea como sea, debemos cuidar de nuestro planeta, se lo debemos a nuestros descendientes y tienen derecho a ello.