Raúl L, el joven que en la madrugada del pasado sábado resultó brutalmente agredido cuando intentó evitar una agresión machista dice que si volviera a cruzarse con otra agresión de este tipo volvería a ayudar aún sabiendo lo que le ha ocurrido.

En declaraciones desde el hospital Reina Sofía en el que se encuentra ingresado desde el sábado, asegura que tanto si la agredida es una joven como si es un chico, él siempre saldría en su ayuda y no se daría la vuelta porque eso no sería humano.

Todavía tiene los ojos hinchados, lo que por el momento ha impedido al especialista valorar el estado del ojo derecho ante una posible intervención quirúrgica, si bien esta mañana los médicos han descartado la intervención en la nariz porque aunque está rota, no tiene el tabique desplazado.

Según comentó, le han llamado desde el juzgado para informarle de que el joven que le agredió se había entregado y ha sido puesto en libertad con cargos, y le habían pedido si podía desplazarse a los juzgados para prestar declaración, pero no ha podido porque ha tenido que hacerse diversas pruebas médicas.

Recordó que los hechos ocurrieron cuando salía de una discoteca en la madrugada del sábado y cuando atravesaba por un callejón escuchó los gritos de una chica que la estaban pegando.

Entonces vio a un chico que conocía de haberlo visto con anterioridad y cuando vió que la estaba agrediendo lo que quiso hacer es atraer al joven hablándole para que dejara de pegarle, pero al parecer no se lo tomó bien y se fue para hacia él para darle un puñetazo en un ojo que le hizo perder el conocimiento, sin recordar nada de lo que le pasó luego hasta que se levantó en la cama del hospital al día siguiente.

El pasado martes prestó declaración a la policía para formalizar la denuncia. "Algo tenía que hacer por lo que me ha hecho. Ahora vendrá el juicio y el juez que haga lo que tengan que hacer y ya está", manifestó.