La Universidad de Murcia ha otorgado al aguileño Juan Carlos Palazón Gallego el Premio Extraordinario Fin de Grado, convirtiéndose en la séptima persona con discapacidad en recibir este premio por la Universidad de Murcia y el primero en Educación Social. Juan Carlos Palazón tiene un 77 por ciento de discapacidad visual reconocida. Es decir, tiene un 5 y un 8 por ciento de visión dependiendo del ojo.

Juan Carlos Palazón ha finalizado el grado con una nota de 9,27 y 33 Matrículas de Honor. «No me gusta el ámbito comparativo, ni competitivo, al final no significa que, aunque yo tengo una nota, puedo ser mejor profesional que cualquier otro compañero, pero sí que es verdad que gratifica, aunque soy más de premios colectivos. Saber que otra compañera de mi propio grupo de trabajo desde primero de carrera también se lo han concedido es un orgullo» manifestó a esta redacción Juan Carlos. Recibió la noticia a través de su madre: «Me mandó un mensaje con una imagen diciéndome que había llegado una carta de la Universidad, que era para mí, que si la abría, le dije que sí porque no sabía cuándo iba a volver a Águilas y ya cuando vi de que se trataba, la verdad que me dio muchísima ilusión ver que reconozcan el esfuerzo», recuerda Palazón.

Juan Carlos quiere compartir este premio con compañeros, sus profesores y su familia. «También es un premio que reconoce el esfuerzo de unos compañeros que han sabido atender mis necesidades, de unos profesores totalmente profesionales que han sabido dar cobertura a estrategias metodológicas para cubrir la propia necesidad y una familia que me apoya en todo momento y que ha salido respetar mi decisión y tratarme de igual manera que al resto de mis hermanos, aunque yo sea una persona con discapacidad», afirma Palazón, y añade que este premio «reconoce el esfuerzo de muchas horas, de 4 años con plenitud de dedicación a un estudio del que estoy enamorado y a unos compañeros, unos profesores y una familia que ha sabido estar ahí conmigo y me han salido dar y reaccionar a mi estado de ánimo, cada vez que venía épocas difíciles».

También destaca los servicios de la Universidad para atender a personas como él: «Al final el que ha hecho los exámenes he sido yo, pero tener un servicio de la Universidad que haga posible que tú puedas tener los apuntes en formato accesible también es una ventaja porque me permite realizar mi actividad académica en igualdad de condiciones que el resto de mis compañeros».

Actualmente está trabajando en un servicio de la Universidad de técnico atención a la diversidad y al voluntariado, destacando la labor del profesorado: «Me sorprendió el respaldo que esos profesores me han dado y de cómo corrió la noticia por los departamentos, porque yo no transmití directamente a todos los profesores este premio que se me concede, sin embargo me han felicitado».

Juan Carlos Palazón destaca que recibir el Premio Extraordinario Fin de Grado abre un camino. «Susana de unidad digital y yo nos dimos cuenta de que ya había habido gente con discapacidad premiada anteriormente, pero sin embargo en el Grado de Educación Social yo era la primera persona con discapacidad al que se le otorga». Los premios a personas con discapacidad se empezaron a conceder a partir de 2014. Palazón concluye que «en los últimos 5 años ha sido cuando las personas con discapacidad hemos podido llegar a ese alto rendimiento académico y que también puede ser una variable de estudio más adelante de cómo se están haciendo las cosas los últimos 5 años y cómo se pueden aplicar todas estas estrategias a la educación secundaria y primaria».