La Audiencia Provincial de Murcia ha condenado a penas que suman dos años y diez meses de prisión y a diez días de localización permanente a un hombre que reconoció en el juicio que agredió a su expareja cuando esta llevaba en brazos al bebé de ambos, de solo ocho meses de edad, que también resultó herido al caer aquella al suelo.

La condena, que incluye penas de alejamiento de tres años y de seis meses con respecto a la expareja y de seis meses con respecto al pequeño, ha sido dictada tras el pacto de conformidad al que llegaron la fiscalía y la defensa del acusado, Jonathan J.H.

Las conclusiones del ministerio fiscal, a las que ha tenido acceso Efe, indican que los hechos ocurrieron en la madrugada del 29 de marzo de 2019, cuando el acusado, con el pretexto de ver al niño, se presentó en la vivienda en la que ella residía con este, ubicada en Torre Pacheco.

Cuando la mujer bajó a la calle con el bebé, fue coaccionada para que se introdujera en el coche en el que había llegado, que el acusado condujo hasta su residencia, en una pedanía del mismo municipio murciano.

Una vez allí le propinó un puñetazo en la frente y otro en la nariz, lo que provocó la caída al suelo de aquella, junto con el niño, que llevaba en brazos y que sufrió un pequeño hematoma y un leve eritema en la zona de la barbilla, sanando a los cuatro días.

Por su parte, la pareja resultó con lesiones, como fractura de los huesos propios de la nariz, que tardaron en curar 16 días.

La lesionada no ha reclamado cantidad alguna por las lesiones al exponer a la sala que ya ha sido indemnizada por el acusado.