La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (Coag) ha alertado de que la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) podría suponer un aumento del 50,4% de los costes laborales para los agricultores al mes, al pasar de 967 euros por trabajador/mes en 2018 a 1.455 euros en 2020. «Sería una puntilla más para el campo que afectaría sobre todo a las explotaciones pequeñas y medianas, es decir a las familiares», destacó el presidente de Coag en la Región de Murcia, Miguel Padilla.

Según un estudio realizado por técnicos de esta organización en base a los datos reales de una explotación media, con 2-3 trabajadores fijos, el coste laboral de cada hora pasaría de ser abonada a 7 euros en 2018, a 9,66 euros este año.

En un contexto de caída de la renta agraria (-8,6% en 2019) y de entrada sin control de importaciones que no cumplen con las mínimas garantías sociales, laborales y salariales de los trabajadores, «resulta inasumible para las pequeñas y medianas explotaciones».

«Nos expulsa del mercado. Estamos a años luz de poder trasladar al precio de nuestros productos el incremento de costes, en un mercado desregulado en el que se impone la 'ley de la selva'», apuntó el responsable del Área de Relaciones Laborales de Coag, Eduardo López.

López pone como ejemplo que en España se pagaría a los jornaleros 69 euros al día, lo que multiplica por 14 el salario en Marruecos (que es de 5 euros/día).

Coag ha vaticinado destrucción de empleo en sectores que demandan mano de obra de forma más intensiva, como el de frutas y hortalizas.

Esta organización va a pedir al Ministerio de Trabajo participar en la mesa de diálogo social que se abra con los diferentes agentes para abordar la subida del SMI.

Llamada a la tranquilidad

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, tranquilizó ayer a los representantes nacionales de las organizaciones agrarias UPA, Coag y Asaja ante la posible subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), señalando que será «compatible» con el desarrollo de la economía y del sector agroalimentario.

«La subida del SMI a 900 euros ha sido un avance muy importante desde el punto de vista económico y compatible con la creación de empleo. El sector primario tiene unos márgenes muy estrechos y por eso existe la PAC, pero un posible nuevo incremento del salario será compatible con el desarrollo de nuestra economía y del sector agroalimentario», aseguró Planas en su primera reunión tras haber tomado posesión del cargo con los representantes de las organizaciones agrarias.