La vinculación de los hijos del popular artesano Jesús Griñán con Noruega, y más concretamente con la ciudad de Drammen, nació hace cuatro años, momento en el que se cruzaron los caminos de los hermanos Juan Manuel, José y María Jesús Griñán, y del Padre Lars. Éste último se puso en su día en contacto con ellos con el objetivo de pedirles que le fabricaran uno de esos belenes que le impresionaron durante el periodo que estuvo destinado en España.

En plena cuenta atrás hacia una nueva Navidad, la historia se repite y el espectacular nacimiento elaborado por los profesionales de Belenes Murcia, de 50 metros cuadrados y más de 300 piezas, volverá a presidir, por cuarto año consecutivo, la entrada a la Iglesia Luterana de Bragernes.

Desde el domingo 1 de diciembre, los ciudadanos de Drammen -una urbe de más de 60.000 habitantes localizada en la denominada tierra de Papá Noel- y los turistas que la visiten durante estas fechas podrán admirar la majestuosidad de una obra de arte que este año presentará como novedad más destacada las figuras de una pastora samaritana, un pastor leñador y un hombre con un niño en el hombro -todo en escala de 25 centímetros-, que se colocarán junto al portal del Nacimiento.

Para que la exposición sea todo un éxito, los hermanos Griñán pondrán rumbo a tierras noruegas el próximo miércoles para poder iniciar al día siguiente los trabajos de montaje, cuya finalización está prevista para el sábado 30 de noviembre.

El belén estará situado en la misma puerta de la Iglesia Luterana de Bragernes, bajo una preciosa pérgola acristalada y con la nieve a su alrededor. Una imagen que volverá a dejar patente la adaptación de las familias del país nórdico a la tradición del belén hebreo al estilo murciano.

Otra de las novedades de esta nueva visita de los hermanos Griñán a Drammen tiene tintes gastronómicos. Y es que el viernes 29 de noviembre deleitarán a los noruegos con una paella española de arroz y costillejas, para lo que no solo incluirán en el equipaje las piezas del belén, sino también una paellera para 20 personas. «A ellos les encanta nuestra gastronomía y nos hemos marcado el reto de comernos una paella en Noruega acompañada de un buen vino de Murcia», avanza a este diario Juan Manuel Griñán.