La plataforma Pacto por el Mar Menor está integrada por más de 1.000 personas que se han adscrito a título individual, además de treinta asociaciones tanto ecologistas, vecinales, culturales y deportivas. Isabel Rubio como portavoz, y Celia Martínez como socia ponen 'voz' a cuatro años de trabajo

«No pagamos cuotas ni recibimos ningún tipo de subvención, lo que nos permite ser libres para denunciar a los responsables de este atentado contra el medio ambiente», apunta Isabel Rubio. Once personas forman parte del grupo de coordinación.

Ni reciben ayuda económica, «ni la pretendemos», insiste Rubio, que, a sus casi 70 años, le ha tocado vivir «con mucho dolor» el último episodio de mortandad en el Mar Menor, el ocurrido el fin de semana del puente del Pilar. Miles de toneladas de peces (se apunta que unas seis mil) perecieron a consecuencia de la falta de oxígeno en el agua.

La DANA fue el desencadenante, que no la causa, han apuntado hasta la saciedad los colectivos que integran el Pacto. «Es cruel que hayan dejado perder este ecosistema al que yo tengo especial afecto porque la primera agua salada que entró en mis ojos, de muy pequeña, fue la del Mar Menor; no he sido capaz de ver los vídeos y fotos de este desastre, duele demasiado», apunta.

La Plataforma deja claro que no tiene ningún interés en buscar culpables de esta crisis «que ha sido muy anunciada», pero sí de que se pongan medidas para darle un vuelco a la situación. Un anuncio que, recuerda Rubio, se remonta a 1980, cuando se celebraron las primeras jornadas sobre el Mar Menor y un científico advirtió que si se desarrollaba la agricultura en el entorno más cercano a la laguna salada, los restos de abonos, fitosanitarios y demás nutrientes, acabarían en las aguas marinas y «se produciría la aniquilación de la flora y fauna». Una profecía tristemente cumplida. Isabel subraya que están muy cansados de la actitud de las administraciones competentes en frenar este atentado, «que se siguen pasando la pelota unas a otras» y recuerda que la plataforma ha llegado con su denuncia hasta Bruselas.

Lo que más le rechina a este colectivo es que desde una de las regiones más secas de Europa se esté enviando agua, en forma de hortalizas, a la Europa húmeda: «Es un pecado ecológico».

Al Pacto por el Mar Menor le han llovido críticas casi desde que echó a andar, con acusaciones de «malos murcianos», y todo porque «nos hemos negado a enterrar el problema». «Es una historia tan vieja como la humanidad, matar al mensajero».

Celia Martínez es ingeniera agrónoma y ha sido concejala del PP en el Ayuntamiento de San Javier y directora general de Investigación e Innovación en la Comunidad Autónoma hasta 2015. Se unió a la plataforma apenas un mes después de crearse. Con ellos compartía entonces «el sentimiento de indefensión» que padecía este ecosistema.

«Soy marmenorense, me he criado en el Mar Menor, he vivido día a día su deterioro e intuía que algo no se estaba haciendo bien. Deseaba gritarlo», apunta Celia, quien perdió la audición con 8 años. Recuerda los veranos de imágenes y color pero sin ruido en este enclave natural y su vínculo con él es de superación. «Es justo hoy lo que el Mar Menor debe hacer; es como devolverle parte de lo que me dio».

Celia se felicita de que «si algo ha caracterizado a esta plataforma es el respeto que recibimos a pesar de tener opiniones distintas; se nota que nos valoran, aunque les irrite. Creo que cualquier estrategia de desprestigio como las tonterías de politización y otras lanzadas para intentar que perdamos fuerza o nos agotemos caen por su propio peso».

Tanto Isabel como Celia quieren ser optimistas respecto al futuro del Mar Menor. La primera duda, sin embargo, de la capacidad «de los gestores» políticos. La segunda tampoco se fía mucho de ellos porque «tienen tendencia al relax, a la inercia, a la negación en un ejercicio suicida de autodefensa absurda». Sin embargo, sí considera que la laguna tiene futuro «si no como el que conocí, de otro modo vivo, pero siendo singular».

Por su tenacidad en la lucha por lo que consideran justo, la plataforma Pacto por el Mar Menor se ha hecho merecedora de ser la Importante del mes de octubre de LA OPINIÓN. La palabra derrota no entra en su vocabulario, porque aman este espacio singular y luchan por recuperarlo.

Cartagena lanza el SOS

Organizada por la Federación de Asociaciones de Vecinos de Cartagena y su Comarca (FAVCAC) y promovida por Anse, Ecologistas en Acción y Pacto por el Mar Menor, la ciudad de Cartagena va a ser escenario de una manifestación el próximo día 30 de octubre bajo el lema 'SOS Mar Menor'. Aunque en un principio estaba previsto que saliera de la Plaza de España a las 18 horas, la continua afluencia de organizaciones y personas que se suman a esta protesta ha hecho que su punto de salida se traslade a la Alameda de San Antón. La hora se mantiene. El objetivo es reivindicar una solución inmediata para la situación que está atravesando el Mar Menor desde hace muchos años llegando ahora a estar al límite. «Desde las administraciones quieren hacernos ver que la causa de este trágico suceso es la DANA, cuando todos sabemos que la muerte de estos peces venía fraguándose desde hace mucho tiempo por los vertidos, por la construcción masiva y descontrolada y por otras razones que han deteriorado nuestro maravilloso entorno único en el mundo», afirman los convocantes. Se espera una participación masiva.