El sector sanitario ha ganado atractivo en los últimos años de cara a los grupos inversores, tanto nacionales como extranjeros, lo que ha hecho que muchos centros privados de la Región de Murcia hayan recibido recientemente ofertas de los primeros para entrar en su accionariado o para ser adquiridos en su totalidad por estas grandes compañías.

Uno de los ejemplos más recientes lo tenemos en la adquisición del Hospital Virgen de la Caridad de Cartagena y las clínicas Practiser, que pasaron a manos del grupo inversor Magnum Capital hace poco menos de un año, un fondo de capital riesgo que, según ha podido saber LA OPINIÓN, está intentando ampliar su presencia en la Región de Murcia con la adquisición de otros centros privados en los últimos meses y cuyos acuerdos están prácticamente cerrados.

Desde la Unión Murciana de Hospitales y Clínicas (UMHC), patronal que agrupa a los centros sanitarios privados de la Comunidad Autónoma, reconocen que hay numerosos fondos de inversión que «han puesto sus ojos en los hospitales privados murcianos», uno de ellos Magnum Capital. Este grupo, fundado por Ángel Corcóstegui, «ha hecho una fuerte apuesta por el sector sanitario privado» tras entrar a formar parte del accionariado del Institut de Transtorns Alimentaris y tras adquirir el grupo gallego Geriatros, que hace unos años pasó a manos de PAI Partners. Ahora está extendiendo su presencia a la zona de Levante y parece que ha llegado a Murcia para quedarse.

La UMHC afirma que hay fondos de inversión tanto españoles como extranjeros interesados en el ámbito sanitario regional y «están tocando a casi todos los centros», con los que se han puesto en contacto para hacerles ofertas con las que intentar entrar en su capital. «En algunas de estas operaciones está Magnum Capital y se ha llegado a buenos acuerdos con ellos», apuntan. Precisamente, uno de los hospitales que está negociando con el grupo fundado por Corcóstegui en el Hospital Bernal de Caravaca de la Cruz.

Otros de los hospitales que han despertado también el interés de grandes fondos de inversión han sido, por ejemplo, el Hospital Mesa del Castillo de Murcia y el Hospital de Molina de Segura.

El gerente del Hospital Mesa del Castillo, Luis Mesa del Castillo, explica que «algún grupo inversor sí que se ha interesado por entrar en el hospital», aunque sostienen que su política sigue siendo local y «queremos continuar con nuestra gestión, de la que nos sentimos orgullosos». Pese a las reticencias iniciales, el centro hospitalario situado en la avenida Ronda Sur de Murcia no cierra las puertas a futuros acuerdos y dice que «nunca se sabe lo que puede pasar mañana».

Luis Mesa del Castillo asegura que «de vez en cuando nos han contactado intermediarios de fondos de inversión, aunque como no hemos estado interesados no les hemos dado pie a poder hacer ningún estudio sobre el centro para presentar sus ofertas».

Concentración del sector

El gerente del Hospital de Molina de Segura y presidente de la Unión Murciana de Hospitales y Clínicas, Pedro Hernández, considera que el caso de su centro es algo particular, ya que el edificio pertenece al Ayuntamiento de Molina, la gestión es privada y en más del 80 por ciento su actividad se centra en el concierto con el Servicio Murciano de Salud (SMS). Un centro que se levantó para dar cobertura a la comarca de la Vega Media, aunque tiene una parte asistencial para compañías aseguradoras, y es el único hospital privado de la Región con una puerta de urgencias abierta a la atención de cualquier usuario del SMS.

Hernández apunta a que cada vez se apuesta por una mayor concentración del sector sanitario, ya que es una fórmula que ayuda a mejorar los resultados y que permite concentrar las compras. Algunos ejemplos de este modelo lo tenemos en la Región de Murcia en hospitales como el San Carlos, del grupo Quirón; el Virgen de la Vega, del grupo HLA; el San José de Alcantarilla, de Viamed; y ahora el Virgen de la Caridad de Cartagena y las clínicas Practiser, de Magnum Capital.