La murciana Inés Madrigal, la primera mujer reconocida por los tribunales como bebé robada que más tarde descubrió que fue dada en adopción voluntariamente, ha recibido la muerte del doctor Vela con "consternación e impotencia" porque entiende que "con su muerte se cierra el círculo de la Justicia con los bebes robados".

Madrigal ha explicado cómo ha recibido el fallecimiento este domingo del doctor Eduardo Vela, de 86 años, que fue considerado culpable del robo de esta mujer en una clínica madrileña en 1969, pero que fue absuelto por haber prescrito los delitos.

"Estoy en shock porque aunque sabíamos que Vela estaba enfermo, no me lo esperaba", confiesa Madrigal, para quien la muerte del doctor Vela le produce una "enorme consternación e impotencia por el miedo a que ahora todo se cierre y no se hable de la prescripción", ya que es previsible que ahora la causa se aboque a su cierre.

Inés Madrigal sabía, por su enfermedad, que la muerte de Vela era cuestión de semanas o meses pero "creía que iba a dar tiempo a que el Tribunal Supremo se pronunciase sobre la prescripción, que es lo más importante" para ella en este momento. "¿Y ahora qué?", se pregunta.

El Supremo tiene pendiente de resolver los recursos contra la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid presentados por Vela, el de la Fiscalía y también de la propia Madrigal, pero ahora previsiblemente la causa decaerá porque la muerte del doctor.

Y ello sucede apenas una semanas después de que presentara un escrito al alto tribunal en el que pedía que no tuviera en cuenta que fue dada en adopción, un hecho que descubrió tras el juicio a Vela, para que así se pronunciase sobre la prescripción.

Consciente de las consecuencias que supone para el procedimiento la muerte de Vela, confía en que el alto tribunal "busque una solución que dé respuesta y sirva para las cientos de causas bloqueadas o cerradas" que esperaban un pronunciamiento del Supremo.

Aun con este escenario, Madrigal dice esperarse cualquier cosa del Supremo. "Igual nos deja con la boca abierta y hay una forma legal de entrar en la prescripción porque ellos saben que no se puede quedar todo así y hay que dar una respuesta, porque es un hecho que en este país se han robado bebés", añade.

Pese a mantener su esperanza, entiende que es más que probable que "si el círculo de Vela se cierra, el círculo de la Justicia para los bebés robados se cierra también".

Ahora bien, exceptuando el asunto de la prescripción, deja claro que su lucha ha tenido éxito porque todos sus objetivos se han cumplido ya que el fin último era encontrar a su familia y gracias al ADN, lo ha conseguido.

Por eso afirma que el futuro pasa por impulsar los encuentros entre familias mediante el ADN ya que asegura que la Justicia no les va a ayudar a encontrar a nadie, un objetivo que promueve a través de la asociación Infogenes, de reciente creación.