La Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) investigará las causas de los peces muertos en el Mar Menor, así como de crustáceos este fin de semana tras la orden que dio el propio fiscal jefe del TSJ de la Región, José Luis Díaz Manzanera.

Las diligencias, que dirigirá el fiscal de Medio Ambiente, Miguel de Mata, tendrán por objeto determinar si la muerte de los miles de ejemplares aparecidos muertos tienen un origen criminal, debido a los vertidos a la laguna, o es consecuencia de los arrastres a la laguna producidos durante el reciente episodio de gota fría, como achacaron desde el Comité Científico del Mar Menor y el propio Antonio Luengo, Consejero de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente. El fiscal Miguel de Mata explicó a esta Redacción que la Fiscalía no va a conformarse con «la explicación oficial por parte de los políticos» y que la ciudadanía tiene derecho a que el asunto «se investigue a fondo».

Como punto de partida, el Ministerio Fiscal se servirá del informe elaborado por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, que tanto el pasado sábado como ayer recogieron muestras del agua para determinar las causas de la aparición de los miles de peces y cientos de crustáceos y otras especies muertos a orillas de la playa de la localidad de San Pedro del Pinatar.

La Delegación del Gobierno ya había señalado el sábado que los agentes estaban tomando muestras con el fin de analizarlas y encontrar la causa del incidente. La investigación, añadían las fuentes, intentará «dar con los responsables» y el Seprona «no dudará en tomar las medidas que considere oportunas, y llevarlo, si compete, a los juzgados», donde a través de la Fiscalía ya se ha tomado la iniciativa.

A lo largo de la noche del pasado sábado distintas especies, como decenas de anguilas, morían fuera del agua, mientras que todavía ayer, a primera hora de la mañana, los vecinos se acercaban a orillas de la playa para ver cómo continuaba la situación, pero la pesadilla seguía: miles de peces, así como pequeños langostinos, se agolpaban en la arena de la playa de Villananitos, asfixiados «por la falta de oxígeno», según apuntan los primeros datos.

La Consejería de Salud envió un aviso para recordar que muchos de estos ejemplares podrían llevar varios días muertos, por lo que no eran aptos para su consumo.

Los agentes medioambientales de la Dirección General de Medio Natural también estuvieron trasladando aguas adentro los peces que continuaban vivos para poder garantizar su supervivencia; mientras que los que estaban muertos a orillas de la playa fueron retirados.

Otro grupo se paseó en motos acuáticas por la orilla de Villananitos para tratar de oxigenar el agua, aunque posteriormente, al ver que sólo se removía el fango, se enviaron embarcaciones al fondo de la laguna para bombear el oxígeno, según apuntó el investigador del Comité Científico del Mar Menor Javier Gilabert.

Representantes de grupos ecologistas y de partidos políticos se acercaron además este domingo hasta la playa para contemplar en primera persona la situación y exigir soluciones.

La llegada de los peces muertos no sólo ha conmocionado a los vecinos de Lo Pagán, sino a los de toda la Región, que mostraron su indignación en las redes sociales, llenas de imágenes de las especies en la orilla de la playa. Desde La Manga, los vecinos también denunciaron la presencia de más cadáveres llegados a esa zona del litoral marmenorense.

También estuvo en Lo Pagán, en una visita «privada de urgencia», el presidente regional, Fernando López Miras, que quiso evaluar los daños acompañado por Luengo y aseguró que esta crisis se ha convertido en una «emergencia nacional».

Una tragedia que llega tras aprobar un plan para proteger la laguna

Esta nueva tragedia que asola el Mar Menor ha llegado tan solo un par de días después de que el Consejo de Gobierno diera el visto bueno -el pasado jueves- a un Plan de Gestión Integral de los espacios protegidos de la laguna y la franja litoral mediterránea de la Región, cuyo texto refleja, entre otros puntos, una velocidad de 5 nudos en los calados con menos de 4 metros y la construcción de 5 balnearios. Este plan gestionaría 31.123 hectáreas en San Javier, Los Alcázares, Torre Pacheco, San Pedro, Cartagena, Águilas y Mazarrón, y en 6 años incluiría actuaciones por 22 millones de euros, entre ellas la inclusión de boyas de fondeo ecológicas. El Plan, que daría respuesta a la aplicación de las Directivas comunitarias de Hábitats y Aves, a la Ley estatal 42/2007, recoge 64 acciones concretas para mantener, mejorar o, en su caso, restablecer el estado de los elementos objeto de conservación, minimizar o evitar impactos, así como favorecer la participación e implicación de los sectores sociales y económicos en la gestión. Así lo detalló el consejero de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente, Antonio Luengo, quien además presidirá hoy en San Pedro el Comité de Ecología Lagunar para evaluar el estado del Mar Menor tras estos últimos acontecimientos.