«Quiero justicia, porque fue una negligencia de la empresa», tiene claro Abdelaziz Hassimatar, el viudo de la mujer que fallecía la semana pasada aplastada por una envasadora en una empresa de cítricos de Fortuna.

Hassimatar atiende a LA OPINIÓN horas antes de viajar hasta Marruecos, su país de origen, para dar sepultura al cadáver de su esposa. «Sé que la máquina estaba rota, que no funcionaba bien», asegura el hombre, que ha contratado los servicios del abogado Jawad Romaili para que se ocupe del caso. Un asunto que está judicializado y por el que ya han declarado, en calidad de investigados, tres responsables de la empresa, apunta el letrado.

«Mi mujer tenía 39 años y ahora me ha dejado solo con tres niños y pocos recursos», insiste Hassimatar, que, aunque trabaja en el mantenimiento de una finca, no llega «a fin de mes». Él lleva más de tres décadas en España y sus hijos, de 16, 12 y 6 años, han nacido en este país.

Lo de que la máquina estaba rota «lo comenta la gente», afirma el hombre, que añade que su esposa trabajaba «en la envasadora, pero dos días antes (del accidente) la mandaron al trillaje». «La pusieron en un puesto para el que ella no tenía formación», dice.

El día que se produjo el accidente mortal, este vecino de Fortuna recuerda que había viajado a la localidad alicantina de Crevillente para comprar unas cosas que le había encargado su esposa. Se enteró de lo sucedido «por un compatriota», no porque le llamase nadie de la empresa de cítricos. A día de hoy, asegura, aún no se han puesto en contacto con él ni siquiera para darle el pésame por la pérdida de su mujer.

El abogado Jawad Romaili dubraya que «no queremos que esto vuelva a ocurrir» y que «no es una cuestión económica, porque al final el dinero se va». Se trata de «depurar responsabilidades», por eso se han personado en la causa.

Ahora los restos mortales de Hind El Bekkali descansarán en Marruecos, donde han podido llevarlos gracias a cómo se ha portado el cónsul, apunta Romaili. «Llamó a la familia para interesarse y ha estado bastante preocupado», comenta al respecto.

Este periódico se puso en contacto con la empresa de Fortuna donde se produjo el siniestro mortal. Desde esta sociedad apuntaron que el caso está «judicializado», sin querer hacer, de momento, más valoraciones.