La Red de Colectivos por los Derechos y Libertades, de la que forman parte más de 50 organizaciones, manifiestan su apoyo a la vicepresidenta del Parlamento autonómico, Gloria Alarcón, por ausentarse del hemiciclo unos minutos el pasado 26 de julio, durante la última sesión de la investidura del presidente de la Región, Fernando López Miras, para manifestarse a favor de “la justicia, la igualdad y el respeto a la diversidad”.
La participación de Alarcón en la movilización fue muy criticada por Vox, que pidió la reprobación de la diputada socialista por marcharse “del pleno más importante de la legislatura para participar en una manifestación convocada contra otros grupos de la Cámara, cometiendo una clara dejación de funciones”.
Los colectivos que respaldan a la vicepresidenta califican los discursos del partido de extrema derecha de “misóginos, machistas, xenófobos y lgtbifóbicos” e insisten en que la asistencia de la Alarcón a la movilización responde a uno de los principios sobre los que se asienta el Estatuto de Autonomía, que reconoce que “la Asamblea regional representa al pueblo de la Región de Murcia” y define “la libertad, la justicia y la igualdad” como valores superiores.
“Es penoso que un partido con representación parlamentaria cometa tales despropósitos, a no ser que persigan aquello que en su día manifestaron” cuando aseguraron que querían cerrar la Asamblea “por inutilidad y convertirla en lo que era antes, una provincia”, declaran.
Por su parte, Alarcón dice sentirse “satisfecha” de haber escuchado las demandas de la “amplia representación ciudadana” que el día de la investidura se concentró ante las puertas del Parlamento murciano. “En esta legislatura deben respetarse y desarrollarse las justas demandas con lealtad y rigor para que la igualdad y el respeto a la diversidad sean garantizados”.
La Red de Colectivos por los Derechos y Libertades han registrado este jueves ante la Comisión de Peticiones y Defensa del Ciudadano un documento para que el Parlamento eleve al órgano competencial que corresponda la petición de que “no se permitan acciones que vulneren los derechos fundamentales del conjunto de la ciudadanía, que incluye las libertades de nuestros diputados y diputadas de ejercer su actividad política apoyando a quienes representan”.
Los colectivos exigen que la Asamblea “sirva para lo que se creó, proteger la democracia, la justicia y la igualdad, así como la libertad, sin permitir discursos de odio o actitudes machistas, lgtbifóbicas y racistas que desvirtúan el espíritu para el que fue creada esta institución”.
También reclaman el archivo de la solicitud de reprobación de Vox, en cuanto consideran que se trata de una medida que atenta “contra todo aquello que representa la diputada, que son los valores que como ciudadanos y ciudadanas pretender defender”.
