Pese al tono calmado que le caracteriza, Juan José Liarte sacó en su intervención los argumentos más radicales de Vox, refiriéndose a «la dictadura progre», criticando el trabajo de las ONG en el Mar Mediterráneo y calificando la Ley de Memoria Histórica como «soflama totalitaria». Una vez que el partido ultraderechista se decantó por votar a favor de la investidura de López Miras, Liarte asegura que a partir del próximo martes pasarán a la oposición para reivindicar desde allí los puntos de su programa que no se han acordado en el documento previo a la investidura.

Entre ellos, una de las pretensiones que más les aleja de PP y Ciudadanos: el nuevo Estatuto de Autonomía, aprobado hace unos meses en la Asamblea con el voto favorable de los otros cuatro partidos de la cámara. Liarte señala que lo combatirán «porque abre la puerta al cierre del trasvase Tajo-Segura».

El portavoz de los ultraderechistas presumió de que su formación ha sido capaz de llegar a un acuerdo con PP y Ciudadanos, partidos con los que tiene notables diferencias ideológicas. «Vox ha demostrado que es capaz de posponer algunas de sus pretensiones cuando se enfrenta a la formación de un gobierno en un contexto de soledad frente a las imposiciones de la dictadura progre», manifestó. Pese a que no estarán en el gobierno, confían en que PP y Ciudadanos ejecuten las medidas que han acordado para la investidura. «No tenemos motivos para dudar de que sus compromisos han sido sinceros», añadió Liarte. Por tanto, aseguran que comienza una nueva etapa en la que serán necesarios los acuerdos y el entendimiento entre las tres fuerzas de la derecha.

Respecto a las reticencias iniciales de Ciudadanos a pactar con ellos, se mostró satisfecho e incluso salió en defensa de la formación naranja por la polémica surgida a través de su veto en la manifestación del orgullo gay: «Entre partidos constitucionalistas cabe el desacuerdo, pero no podrá justificarse la violencia y tampoco los intentos de exclusión de la vida pública».

A partir de ahí, el portavoz de Vox enumeró desde la tribuna su satisfacción por las promesas que le han arrancado a López Miras, como las inspecciones desde la Consejería de Educación «para que no se produzca adoctrinamiento político en las aulas», la puesta en marcha del cheque escolar, o la enseñanza de los valores constitucionales y patrióticos en los colegios frente a «la pesadilla totalitaria de la memoria histérica».

Liarte también reiteró su ideario sobre lo que Vox llama 'violencia intrafamiliar', en un día en el que el machismo era protagonista por el crimen de Beniel, al que equiparó con otro caso reciente en el que una mujer mató a su hijo . Posteriormente, preguntó al resto de diputados si era lícito que, siendo dos casos idénticos, al padre se le juzgara en un tribunal diferente.