La quema de rastrojos y restos de poda procedentes de la agricultura está totalmente prohibida, de ahí que en lo que va de año la Policía Local de Murcia haya abierto 296 expedientes sancionadores a agricultores que son reincidentes en este tipo de prácticas.

Para ofrecer una alternativa a todos aquellos pequeños propietarios que no pueden permitirse el coste que supone la adquisición de maquinaria para deshacerse de estos restos, el Ayuntamiento de Murcia y Asaja (Asociación de Jóvenes Agricultores) han firmado un convenio para la adquisición de un tractor y una trituradora con la que dar servicio a estos propietarios y a los minifundios de la huerta de Murcia.

Esta trituradora entrará en funcionamiento el próximo mes de septiembre y para poder hacer uso de ella los interesados deben llamar al teléfono 968 284188 para coger cita y que se cuente con ellos en el calendario que se va a elaborar para ir a pedanías.

El concejal de Desarrollo Sostenible y Huerta, Antonio Navarro Corchón, pide a los propietarios de terrenos que tengan restos de broza que los amontonen y los mantengan hasta que la trituradora esté en funcionamiento, tras el verano, ya que la quema de estos rastrojos está totalmente prohibida. El edil subraya que solo está permitido en casos muy puntuales, con autorización de Sanidad Vegetal, cuando existe algún problema de plagas.

Por su parte, el concejal de Deportes y Salud, Felipe Coello, reconoce que estas prácticas han sido habituales entre los pequeños agricultores, pero insiste en que la normativa está en vigor desde el pasado mes de marzo y que «todos estos pequeños pasos ayudarán a mejorar la calidad de nuestro aire y a reducir las enfermedades respiratorias».

Junto a Navarro Corchón y Coello también estuvo ayer el concejal responsable de Hacienda y Seguridad Vial, Eduardo Martínez-Oliva, quien expuso que frente a los 74 expedientes sancionadores abiertos en 2017, en 2018 se llegó a 110 y en 2019 ya son 296, ya que se ha intensificado la labor de vigilancia que hace Policía Local de Murcia. No obstante, la sanción es el último paso y sólo se pone en marcha cuando el agricultor o propietario del terreno es reincidente. Estas multas oscilan entre los 150 y los 400 euros.

Las labores para triturar los restos y así convertirlos en compost serán totalmente gratuitas para los pequeños agricultores hasta que se complete la subvención de 20.000 euros que ha dado el Ayuntamiento, tal y como indica el presidente de Asaja, Alfonso Gálvez. Además, no es necesario estar asociado para hacer uso de este sistema, aunque se dará prioridad a quienes sí que lo estén.