Unos dos mil opositores han presentado una reclamación en contra de sus notas en los tribunales constituidos para las pruebas de acceso al cuerpo de maestros de la Región de Murcia celebradas el pasado 22 de junio, y que se han saldado con un 42 por ciento de aprobados. En juego están 1.300 plazas de ocho especialidades.

La Consejería de Educación ha hecho una estimación sobre el número de los opositores que han reclamado, y calculan que hasta la próxima semana no podrán tener los datos concretos, así como las que se han admitido a trámite y las que se han desestimado.

Sin embargo, los testimonios de personas que se quejan del proceso, de la nota, de las revisiones y/o de los exámenes no ha parado de aumentar y se canalizan por diferentes redes sociales, asociaciones y sindicatos.

Se quejan de que hay tribunales que no dejan fotografiar los exámenes, pese a que fue una de las novedades «para dar más transparencia al proceso», según anunció en su día la consejera en funciones Adela Martínez-Cachá. De que había nombres que estaba adscritos a unos exámenes y unas notas que no eran las suyas; se quejan de «poca objetividad e impotencia de no poder hacer nada»; de que les dicen que cada tribunal tiene sus propios criterios; y de que «se pasan la pelota», entre la consejería y los tribunales. Al final sólo les queda «esperar a que finalice el proceso de oposición y salgan las listas de plazas e interinos e interpongan un recurso legal».

La Asociación de Interinos de la Región de Murcia, Aidmur, ha convocado una asamblea para el próximo martes, 9 de julio, en el salón de actos del Edificio Moneo (anexo al Ayuntamiento de Murcia) por el «caos en las oposiciones» y en la cual participará el abogado José Mateo.

«El objetivo es asesorar jurídicamente a los compañeros y compañeras afectadas que quieren presentar denuncia», explican desde Aidmur, y añaden que también van a defender que se cambie el proceso de oposición. Por ejemplo, que las pruebas dejen de ser eliminatorias.

Desde Aidmur, por último, apuntan: «Estamos convencidos de que gran parte de estos problemas son consecuencia de las lamentables condiciones en las que se encuentran los compañeros que forman parte de los tribunales».