El portavoz del PP en la Asamblea Regional, Joaquín Segado, se ha mostrado este martes "convencido" de que "la investidura" de Fernando López Miras "es posible", ya que lo que une a su partido con Ciudadanos y Vox es más de lo que los separa, y la alternativa es que la comunidad autónoma caiga en manos del "sanchismo".

En ese sentido, ha apelado durante su intervención en el debate de investidura, a los dos partidos conservadores a decidir si prefieren "dar estabilidad" a la Región, "generar confianza" en los empresarios e inversores y "poner en valor los intereses de los ciudadanos" o, por el contrario, poner por delante los intereses de las siglas políticas".

"No hay espacio para la ambigüedad ni para ponerse de perfil", ha advertido, y ha insistido en que el acuerdo en el que el PP está trabajando con Vox es "compatible" con el ya suscrito con Ciudadanos, algo que ayer negaba su portavoz, Isabel Franco, a la vez que "no necesita de más actores ni notarios", como exigen los ultraconservadores, porque será el propio PP quien garantice su cumplimiento.

Así, le ha advertido a Franco de que "si el rechazo a Vox desemboca en un pacto con Diego Conesa", la comunidad autónoma quedará en manos del "presidente más sanchista" de todas las regiones, con el consecuente sacrificio para la región.

Segado ha insistido en la idea de que el resultado de las urnas fue el apoyo mayoritario a un gobierno "reformista y liberal" y López Miras, ha dicho, es el único candidato con una "mayoría nítida" y que "suma un amplio apoyo" para liderar un Ejecutivo basado en acuerdos de programa, mientras que "otros solo han ofrecido sillones, intercambio de cromos".

En ese sentido, se ha referido a la propuesta del PSOE para votar al candidato de Cs en el Ayuntamiento de Murcia, Mario Gómez, como alcalde, a cambio de su apoyo en la comunidad autónoma, y ha insistido en que el pacto ofrecido a los de Albert Rivera es "útil para la sociedad" y no se ha pensado en "beneficio" del partido.

"Hoy toca elegir entre dos modelos, dos alternativas bien diferenciadas: el modelo que representa el PP, de diálogo y acuerdo, o el modelo del caos", ha señalado y ha apuntado que los gobiernos que hay que "regenerar" son los que tienen una gestión como la que había en Andalucía.

Segado ha tenido también duras palabras contra Conesa, a quien ha acusado de no ser lo que parece y esconder "bajo la careta del diálogo" a un "político autoritario" que "se muestra débil con los fuertes y fuerte con los débiles".

Le ha afeado que no sea él quien realmente "manda" en los socialistas murcianos, sino que el poder orgánico del partido se sitúe en políticos como el alcalde de Calasparra, José Vélez, investigado judicialmente, a pesar de lo cual no se le ha apartado de las filas del partido.

Asimismo, le ha acusado de cambiar de principios políticos y renegar de los mismos, ya que se mostró dispuesto a no recuperar el impuesto de sucesiones y donaciones o de aplicar el 155 en Cataluña para ganarse el apoyo de Cs, a la vez que "guarda silencio" cuando Pedro Sánchez "perjudica gravemente" los intereses de la región.

Los acuerdos que el PP impulsa con Vox, ha defendido, se encuadran en el "marco de la Constitución", ha subrayado, mientras que el PSOE "aprovecha los votos de los amigos de ETA". "Prefiero sentarme con el partido en el que milita Ortega Lara que pactar con los que justificaron su tortura", ha añadido.

Por todo ello, ha insistido en su convencimiento de que "ningún diputado reformista y liberal" de la Cámara querrá ser responsable "por acción u omisión" de propiciar un gobierno "sanchista".