Bodegas Alceño se ha destacado en los últimos años como una de las más significativas de la Denominación de Origen Jumilla, como lo demuestran las medallas obtenidas por sus vinos en casi todas las categorías del Certamen de Calidad de la D.O. de este año. Andrés Bastida, gerente de Alceño, reconoce que «es bastante difícil conseguir un galardón con el nivel tan alto que tienen actualmente los vinos de Jumilla», y se muestra orgulloso de que sus vinos Alceño Syrah Premium y Alceño Selección «suelen conseguir buenos reconocimientos en las guías y en muchos concursos».

En este sentido, el responsable de la bodega explica que «cada vez se hace un trabajo más exhaustivo, sobre todo en el campo y también en la bodega». De una cosecha a otra puede haber variaciones en la calidad de la uva: «Hay muchos aspectos que hacen que cada año las vendimias sean diferentes: la lluvia, las horas de sol, etc. Nosotros hacemos un trabajo en el campo para intentar mantener la calidad año tras año, pero contra la naturaleza no se puede luchar. En los años duros, como la pasada vendimia, nos toca hacer una gran selección en el campo para vendimiar las uvas en perfecto estado». Según Bastida, las técnicas del enólogo son importantes, y también la bodega. «Cada bodega tiene su propia identidad, que hace que los vinos tengan un marcado carácter diferenciador».

Perfil del consumidor

Perfil del consumidorLa marca Alceño forma parte ya del paisaje vinícola en las tiendas especializadas y en la hostelería. Para conseguirlo, según los responsables de la bodega, «lo más importante es la calidad de los vinos y la filosofía de la bodega: trabajamos mucho en ir adaptando los vinos al perfil del consumidor manteniendo nuestra identidad y en ir año tras año intentando conseguir un nivel más alto de calidad. Cada vez son más los consumidores que demandan nuestros vinos, pero contamos también con una buena red comercial y trabajamos con muy buenos distribuidores que hacen posible que nuestros vinos estén cerca del cliente final.»

Como bodega arraigada en la tierra, la uva Monastrell, la variedad autóctona reina en los vinos Alceño, aunque también trabajan con variedades tintas como Syrah, Garnacha Tintorera o Tempranillo que se adaptan perfectamente con la Monastrell. Con ellas "hacemos unos vinos expresivos, como nuestro Alceño Syrah Premium, que es un 85% Syrah y un 15% Monastrell, o nuetro Alceño Selección, que es una mezcla de las cuatro variedades mencionadas". En vinos blancos, Alceño trabaja con las variedades Sauvignon Blanc, Airen y algo de Macabeo.

En cuanto a los mejores logros de Alceño a lo largo de los años, «la añada 2012 fue espectacular, de hecho nuestro Alceño Syrah Premium de esta añada obtuvo 92 puntos Parker. También las añadas 2016 o 2017. Fueron años en que las condiciones climáticas hicieron que tuviésemos una perfecta maduración de las uvas», añade Bastida, para quien no obstante «el clima que tenemos en Jumilla es ideal y son muy pocos los años que las condiciones no son idóneas para las vendimias», concluye.