Aspiran a gobernar el mercado de las salsas picantes en España con una receta especial y secreta que ya está arrasando en Amazon y en restaurantes de todo el mundo. Saben que el consumo de estas salsas no está muy extendido entre los españoles pero vieron una oportunidad y quieren que la gente "adopte esa costumbre".

Juan Vicente Casanova, un emprendedor de origen venezolano pero que ya tiene largo recorrido personal y profesional en España, ha inventado y comercializado Espicy, una variedad de condimentos entre la que se encuentra la primera salsa picante Sriracha hecha en España, en concreto en Murcia, gracias a una fábrica especializada de la Región que les permite vender su producto "por todo el mundo".

"Empezamos con una fórmula propia de esta salsa en un proyecto familiar en el que me acompañó mi padre y mi hermano", explica Casanova, que recuerda una trayectoria de dos años desde que comenzó a probar con seis ingredientes y a saber conjugarlos hasta dar con una receta que ahora incluso tiene "miles de pedidos" por Amazon. No quieren que afecte al sabor de la comida, tampoco que haga sudar por el picor a los comensales que la prueben. Tiene la pizca de picante justo para "potenciar el sabor", señala el emprendedor.

La salsa picante de Espicy no lleva gluten y es apta para veganos. Está elaborada con seis ingredientes naturales (jalapeños rojos, zanahoria, azúcar, naranja, ajo y vinagre) y "su picante realza las comidas sin cambiar su sabor, dándole un toque justo de picor fácil de adaptar a cualquier cocina, especialmente la española. Al probarla impacta inmediatamente el sabor dulce que aporta la zanahoria con notas cítricas de la naranja, sin ese sabor residual que a veces dejan los conservantes, espesantes y colorantes", subraya.

Esta empresa de salsas buscó una fábrica en España que tuviera la capacidad suficiente para producir y así poder vender cada vez en más países y a través del comercio online, y que estuviera ubicada en una zona donde "fuera muy potente todo lo que tuviera que ver con la alimentación". Aunque no dicen el nombre de la fábrica murciana ni dónde está ubicada, sí se fijaron en una importante industria de Murcia, de donde destacan su "profesionalidad, su experiencia y su seriedad" para mantener la confidencialidad y no desvelar más datos del secreto de esta salsa exitosa.

La salsa picante abrió un negocio que tiene miras a tener gran éxito en España, de donde ya avisan que han llegado "a todos los rincones". Casanova bromea con que mucha gente no sabe que esta salsa ya se vende en Murcia y se puede encontrar en muchos restaurantes y locales de comida rápida. Entre los que destaca, está la Cabaña Buenavista del chef Pablo González-Conejero. "El picante es un producto estrella y ya ocupa su puesto junto a los botes de kétchup, mayonesa y mostaza".

Los dos emprendedores destacan que desde Murcia seguirán fabricando esta salsa que ya está en Estados Unidos y va camino de Kuwait, Venezuela, Panamá o Guatemala. Casanova fija su éxito incluso en la Región: "Para que esta salsa tenga éxito primero tiene que latir muy fuerte dentro de su origen, en Murcia".