Si hay medusas o carabelas portuguesas en la playa, no te bañes y aléjate de la orilla donde pueda haber fragmentos del animal.

Si estás en el agua, aléjate y dirígete a la orilla. En el caso de la carabela, aunque se vea el flotador lejos, los tentáculos extendidos son muy largos y te pueden llegar a tocar.

Si están fuera del agua (en la arena, sobre las rocas, etc.) no la toques aunque esté muerta, puede liberar veneno.