La Fiscalía Superior de Murcia está investigando, a raíz de la denuncia de dos facultativos del servicio de Cirugía Cardíaca del Hospital Virgen de la Arrixaca, si ha existido algún tipo de negligencia médica detrás de la muerte de al menos una decena de personas que estaban en lista de espera para ser operadas del corazón.

Los médicos que han llevado el asunto a la Fiscalía van más allá y dicen que al año estarían perdiendo la vida media docena de personas por no ser intervenidas a tiempo. Un extremo que desde el Ministerio Público tratarán de esclarecer, para ver si hay caso o si esta acusación se archiva.

El Servicio Murciano de Salud (SMS) explica, tras insistir en que colaborará en todo con el Ministerio Fiscal, que los dos denunciantes «están apartados del servicio desde hace meses a consecuencia de un expediente disciplinario, derivado de una investigación por causas graves, que los demandantes han tratado de frenar en todo momento». Además, insisten en que estos cirujanos «no están suspendidos de empleo y sueldo, sino apartados del servicio asistencial».

Tanto el doctor Parra como el doctor Glenn interpusieron una demanda de acoso laboral dentro del servicio de Cirugía Cardíaca de la Arrixaca, pero los inspectores concluyeron que no había tal acoso. «En cambio, sí identificaron problemas e irregularidades en el trabajo de estos profesionales, por lo que antes de tener el informe definitivo los inspectores solicitaron que el SMS adoptara medidas preventivas cautelares de suspensión».

Mientras tanto, el SMS y el Área I de Salud (cuyo hospital de referencia es la Arrixaca) continúan la investigación de esta serie de hechos que se están analizando desde el pasado año. Desde la Administración insisten en que «es importante que se evite cualquier tipo de comentario u opinión en torno a este asunto para eludir interpretaciones de carácter político que no se corresponden con la realidad que se ha vivido y se vive en el servicio en cuestión».