El INE acaba de publicar los resultados de su última encuesta de fecundidad. ¿Le sorprenden los resultados?

Todos los años tenemos datos sobre la natalidad en España. El dato fundamental es la edad a la que se tiene el primer hijo, que se sitúa en los 32 años de media. La edad a la que se decide ser madre se ha ido retrasando constantemente desde 1981, con la llegada de la Transición.

¿Cuáles son los principales motivos por los que se retrasa este momento?

Las razones están claras. Por un lado la economía no ayuda, también influyen las condiciones laborales y los contratos inestables y, en tercer lugar, los problemas de conciliación. Es necesario que se cree una red de guarderías cercanas a los lugares de trabajo y con horarios flexibles que permitan a los padres desarrollar su faceta profesional. Los países nórdicos son un ejemplo de conciliación, ya que allí reducir el contrato a media jornada no implica quedarse con la mitad de sueldo.

¿Hay un aumento de la natalidad en los periodos en los que va mejor la economía?

Lo cierto es que cuando se ha registrado una mejora económica el aumento de la natalidad sólo se percibe entre la población extranjera. Las parejas españolas no sólo ven si la economía está bien en ese momento sino que van un paso más allá y piensan en la previsión de futuro. Si no lo tienen claro no se ponen a tener hijos.

Pero esto está llevando a que tengamos una población cada vez más envejecida...

El grado de juventud de la población es un factor fundamental para que aumenten los nacimientos, pero si cada vez nacen menos niños tenemos menos población joven y envejece la que hay. No conseguimos el nivel de reemplazo necesario. Es cierto que tenemos una población cada vez más grande, pero no porque nazcan más niños sino porque los mayores viven cada vez más años y crece la esperanza de vida. Para llegar al nivel de reemplazo hay que tener 2,1 hijos por mujer y estamos en 1,4. También hay que reconocer que 1998 fue el peor año que recordamos, cuando se bajó hasta los 1,1 hijos por mujer.

¿Cómo está Murcia en esta fórmula?

Murcia tiene uno de los indicadores más saneados. Tenemos más juventud que la media española y más población extranjera.

¿Influye en esta situación el cambio del modelo de familia?

Los nuevos modelos de familia son un factor a tener en cuenta, pero también el que haya relaciones poco duraderas o no tener pareja estable. En los países nórdicos es cierto que hay más hijos, pero también más separaciones. Se crean nuevas parejas y parece que la mejor forma de sellas esa nueva relación es teniendo un hijo juntos.