Fincas de árboles frutales y almendros de la Región se han visto afectados por heladas las dos últimas noches, que, a priori, no han producido graves daños. Las zonas más afectadas han sido explotaciones de Calasparra, Cieza, Jumilla, Cehegín, Caravaca y Bullas, y los daños se han producido en aquellos parajes en los que no se han utilizado los sistemas antiheladas.

«Donde se han instalado estos sistemas, han funcionado perfectamente», ha explicado Antonio Moreno, secretario de Agricultura de Upa, quien añade que tendrían que pasar unos días para poder valorar tanto la intensidad como la extensión de las pérdidas.

Los frutos más afectados han sido los de temporada media y tardía, ya que los tempranos y extratempranos «están lo suficientemente adelantados para que aguanten esas bajas temperaturas, que llegaron a los -2ºC».