La variante de Camarillas será una realidad sobre el terreno y no sólo en el papel el próximo 21 de marzo después de 30 años de anuncios y promesas incumplidas. Esa es la fecha en la que está previsto que puedan circular trenes por este tramo de la línea Cartagena-Chinchilla, un proyecto con el que se quiere reducir el trayecto para llegar de Murcia a Madrid en 20 minutos menos gracias a que el nuevo trazado tiene una distancia de 17,9 kilómetros menos. Esto, sumado a la disminución del tiempo del trayecto gracias a la llegada del Alvia, hará que el viaje a Madrid por Camarillas apenas supere en unos minutos las tres horas de duración.

La variante se abrirá a final del próximo mes después de las tres semanas que permanecerá cerrada por las obras de las conexiones y pruebas de seguridad que hay previstas. Así lo indicó ayer el delegado del Gobierno, Diego Conesa, minutos antes de la reunión de la Comisión de Seguimiento de las Obras del AVE que se celebró en Teniente Flomesta y en la que estaba previsto que se analizara la situación de este proyecto y si se están cumpliendo los plazos previstos.

Conesa indicó que «los cortes del sistema ferroviario son imprescindibles para avanzar hacia infraestructuras del siglo XXI». Por ello recordó que en la línea de Camarillas la previsión es cortar del 2 al 20 de marzo. En el plan de obras se contempla que los días 3, 4, 5 y 6 de marzo se hagan los enlaces de Cieza-Agramón, el 8 de marzo se entregarán las infraestructuras a Renfe y el día 11 del próximo mes Renfe iniciará las pruebas de formación de maquinistas, que se prolongarán durante cinco días, y se entregará toda la documentación necesaria para que la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria emita su autorización definitiva.

Del 2 al 20 de marzo, tiempo durante el que este tramo estará cerrado, habrá salidas en autobuses desde Cartagena y Murcia para llegar a Albacete. En este caso, el delegado del Gobierno anunció que también se está negociando poner conexión desde Cieza hasta la provincia vecina. Será después de estas tres semanas de corte cuando se lleve a cabo la esperada apertura de la variante de Camarillas, el 21 de marzo.

La apertura de este tramo de la línea de Chinchilla permitirá suprimir unos 17 kilómetros en la curva que traza el tendido ferroviario para acercarse a Calasparra y bordear el pantano de Camarillas. Además, la puesta en marcha de la variante permitirá eliminar 11 pasos a nivel, entre Agramón y Cieza.

Diego Conesa también aprovechó para recordar el corte de la línea Lorca-Murcia, que permanece cortada desde este lunes y hasta el 23 de febrero. Por último, la conexión con Cartagena y Alicante se interrumpirá del 21 de marzo al 11 de abril, aunque los trabajos en esas vías comenzarán una semana antes, el 14 de marzo, en la que seguirá operativo el tráfico. Estos cortes servirán para adaptar la señalización, cambiar los sistemas para el uso de la Alta Velocidad, realizar formación de los maquinistas y llevar a cabo las pruebas de la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria. Conesa también espera que la apertura de Camarillas coincida con la llegada del segundo tren Alvia a Murcia.