Casi 31.500 empleados del Servicio Murciano de Salud (SMS) y de la Administración regional están convocados a las elecciones sindicales que celebrará la Comunidad el día 28 de marzo. El número de delegados que serán elegidos en esta convocatoria está aún sin cerrar y no se conocerá hasta finales de este mes, aunque es previsible que supere los 352 de hace cuatro años, debido al aumento de las plantillas que se ha producido desde 2015. Los profesores de Primaria, Secundaria y de las universidades públicas votaron el pasado mes de diciembre.

En estos momentos se calcula que hay unos 52.000 empleados públicos en la Comunidad, aunque el censo definitivo de funcionarios con voto se conocerá en las próximas semanas. Esta cifra resulta superior a la de los anteriores comicios, debido a las incorporaciones que se están produciendo con las oposiciones.

La mayor parte de los empleados públicos que están llamados a las urnas el 28 de marzo pertenecen al Servicio Murciano de Salud, que en este momento da empleo a 22.570 personas.

A Administración y Servicios corresponden 8.859 funcionarios. Esta cifra incluye igualmente a los interinos de la Comunidad.

También tienen derecho a voto otros 728 trabajadores con contrato laboral, que están sujetos a un convenio colectivo de igual forma que los trabajadores de las empresas privadas. La plantilla de personal laboral incluye 606 personas dedicadas a la enseñanza. Pertenecen a este colectivo, por ejemplo, los profesores de áreas técnicas que dan clases en FP.

También forman parte del personal laboral 122 empleados de Administración y Servicios.

Los más de 20.000 profesores de los colegios de Primaria e institutos de Secundaria eligieron el pasado mes de diciembre a los 59 delegados de personal que integran la plantilla de Educación.

Sin embargo, los 22.570 empleados del SMS tienen en ese momento 215 representantes, una cifra que resulta proporcionalmente muy superior en relación a la representación a los docentes.

CSIF critica esta disparidad entre las representaciones de Sanidad y Educación, que atribuye «a la existencia de nueve áreas de salud» en la estructura del SMS. Este sindicato considera que la dispersión obliga multiplicar por nueve la estructura administrativa en cada área de salud y a mantener un número de cargos «desproporcionado». Sin embargo, apuntó que «la Comunidad de Madrid tiene un área de salud única», a pesar de que la población de esta región es muy superior a la de Murcia.

Por su parte, el sindicato médico Cesm y el de enfermería Satse rechazan la pretensión del resto de organizaciones (CC OO, UGT, SPS, CSIF y USAE) para la distribución de las mesas electorales para los comicios sindicales de marzo en el Servicio Murciano de Salud. Cesm y Satse consideran que el hecho de que no existan mesas itinerantes dificulta el acceso al voto de los médicos y enfermeros de Atención Primaria que no podrían votar en su propio centro. «De este modo, no todos los votantes estarían en igualdad de condiciones para acudir a las urnas, lo que supone un ataque frontal al derecho al voto y una merma de derechos a los trabajadores», aseguran los sindicatos que representan al personal sanitario.

A partir de los resultados obtenidos por los sindicatos en las diferentes áreas de la Administración regional se constituirán las mesas sectoriales de Sanidad, Educación y Administración y Servicios, que son las encargadas de negociar con las distintas consejerías. Y una vez configurada la representación sindical en cada mesa sectorial se constituirá la Mesa General de la Función Pública, que es el máximo órgano de representación de los 52.000 empleados públicos de la Comunidad Autónoma.