Las consejería de Salud y Familia están trabajando de forma coordinada para elaborar un protocolo específico sobre cómo atender a una mujer que ha sido violada. Pese a no existir aún un protocolo en sí, se establecen unos pasos que deben seguir todos los profesionales sanitarios cuando se presenta un caso de este tipo:

  • Cuando una mujer ha sido víctima de una agresión sexual debe acudir inmediatamente a un hospital con servicio de Ginecología, ya que son estos especialistas los que tienen que hacer las comprobaciones, tomar las muestras y dar todos los pasos necesarios.
  • Debe acudir al hospital tal y como esté tras la violación, sin lavarse, para no eliminar restos y pruebas.
  • Cuando llega una mujer en esta situación se le suele poner en una sala aparte, para que no esté con el resto de pacientes, y una persona le acompaña en todo momento.
  • Desde el centro hospitalario se llama al forense. Es muy importante que todo se haga de forma conjunta, tanto desde el punto de vista clínico como desde el punto de vista legal, para la recogida de pruebas, exploración y resto de procedimientos.
  • Si la mujer no ha puesto la denuncia se llama a la Policía para que los agentes acudan al hospital y le sea más sencillo el trámite.
  • Cuando llega el forense se le atiende por forenses y clínicos de forma conjunta.
  • Cuando no había medicación conjunta se le prescribía y la víctima tenía que adquirirlo en una farmacia para tomarla. Ahora se le da el kit, se le explica en cinco minutos e inicia de forma inmediata el tratamiento sin preocuparse de otras cosas.